Dos aviones de los Marines de Estados Unidos chocaron en el aire

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Son un caza F-18 y un cisterna KC-130 Hércules que realizaban un entrenamiento. Rescataron a dos tripulantes y otros cinco están desaparecidos.

Dos aviones del Cuerpo de Marines de Estados Unidos colisionaron en el aire durante una práctica de reabastecimiento de combustible en vuelo, frente a las costas de Japón. Cinco militares que los tripulaban se encuentran desaparecidos.

Las naves involucradas fueron un caza F-18 Hornet y un cisterna KC-130 Hércules en el marco de un “accidente registrado a unas 200 millas (alrededor de 300 kilómetros) de la costa de Japón”, según un comunicado oficial de la fuerza.

Una de las siete personas que iban a bordo de los aviones fue rescatada, confirmó a la agencia AFP un portavoz de las Fuerzas de Autodefensa japonesas, que movilizaron cuatro aeronaves y tres buques para las operaciones.

El ministro japonés de Defensa, Takeshi Iwaya, detalló en declaraciones a los medios locales que el soldado rescatado es uno de los dos tripulantes que viajaban a bordo del caza y que su estado de salud “es estable”.

Más tarde, un vocero confirmó que otro tripulante había sido encontrado, aunque no hubo detalles sobre su estado de salud al momento del hallazgo.

“Las operaciones de búsqueda y rescate de los militares restantes siguen en curso”, indicaron los Marines en un comunicado, y se investigan las circunstancias de la colisión.

Cinco tripulantes iban a bordo del C-130 y otros dos en el F-18.

“Agradecemos los esfuerzos de las Fuerzas de Autodefensa japonesas, que respondieron inmediatamente en la operación de búsqueda y rescate”, indicaron los Marines.

Ambos aviones habían despegado de la base aérea estadounidense en Iwakuni, Japón, y “llevaban a cabo entrenamientos programados regularmente cuando ocurrió el accidente”, se informó oficialmente.

Las Fuerzas Armadas estadounidenses tienen unos 50.000 efectivos en territorio japonés.

En noviembre, un avión de combate de la Marina norteamericana se estrelló frente a las costas de la isla japonesa de Okinawa (sur) y sus dos tripulantes fueron rescatados vivos.

Las Fuerzas Armadas estadounidenses también sufrieron problemas con sus helicópteros Osprey: tuvieron que llevar a cabo varios aterrizajes de emergencia, se registró un accidente mortal y un pedazo de uno de los aparatos cayó en el terreno de una escuela japonesa.