Revelan el cruce entre Sampaoli y Messi en pleno del Mundial

Fue en una reunión entre los jugadores y el cuerpo técnico, tras la derrota ante Croacia.

El periodista Ariel Senosiain publicó en el sitio www.cronicasdeayer.com un libro digital que fue escribiendo durante la Copa del Mundo titulado “El Mundial es historias”. La obra cuenta con testimonios en off, que revelaron situaciones y contextos. Una de las más interesantes es la crónica acerca de la reunión que los jugadores tuvieron con el exdirector técnico de la selección, Jorge Sampaoli, y los asistencias Sebastián Beccacece y Lionel Scaloni, antes del partido ante Nigeria, encuentro que marcaría un quiebre en la relación entre los jugadores y el casildense.
“La noche del viernes 22 de junio los futbolistas citaron a una reunión al técnico y dos de sus ayudantes. Los hijos querían retar al padre. Allí fueron Jorge Sampaoli, Sebastián Beccacece y Lionel Scaloni. En no más de quince minutos, escucharían una larga lista de reclamos: las pruebas, la inseguridad, las formaciones, los cambios, las acusaciones, sus peleas, sus nervios. “Si estás nervioso, el jugador lo percibe. Si el jugador no te cree es imposible que después puedas lograr algo tan importante como una organización colectiva”. Sampaoli lo había dejado escrito.
El discurso del plantel, encabezado naturalmente por Mascherano y Messi, apuntó justamente a la pérdida de credibilidad: “No nos llega lo que decís. Ya no confiamos en vos. Queremos tener opinión”, le habrían recriminado al entrenador.
Lo primero que surgió en Sampaoli fue la sorpresa: “¿Opinión en qué?”.
-En todo.
-¿Y ustedes van a armar el equipo, dirigir los entrenamientos, todo?
Messi apuntó especialmente: “Me preguntaste diez veces a qué jugadores querías que pusiera y a cuáles no, y nunca te di un nombre. Decime adelante de todos si alguna vez te nombré a alguien”.
En la sala, además de los veintitrés jugadores y los tres integrantes del cuerpo técnico, estaba el presidente Claudio Tapia. El responsable de la AFA sabía de antemano lo que le dirían al entrenador, a quien sólo le dijo “tenés que ceder”.
El inicio de la reunión tuvo una contundencia claramente mayor a la del final. La conclusión fue el consenso. Que el técnico se enfocara y no alterara. Y que los escuchara, prácticamente lo que había querido hacer en otros momentos.
El relato indica, además, que el rosarino Beccacece pensó en renunciar. Sólo lo frenó el pedido de Tapia a su representante Cristian Bragarnik: “Decile que por favor no se vaya, es al que los jugadores escuchan”. Beccacece, incluso, le advirtió a Sampaoli que un entrenador no podía bancarse todo.
Al día siguiente, Javier Mascherano trataría de disimular lo sucedido: “Los mejores técnicos del mundo escuchan a sus jugadores, que son quienes luego deciden”.
A esa altura ya sería muy difícil extraer del imaginario popular la injerencia que tuvo en la selección la vieja guardia, tantas veces denominada “club de amigos”, no sólo en este momento sino en todos los otros. Para jugar contra Nigeria, la selección saldría a la cancha con “los mismos de siempre”.