Desde el Movimiento “Los Sin Techo”, José Luis Ambrosino, aseguró que “el porcentaje de nuestro sector que está a favor de un cambio de gobierno ronda el 80%”. Ese gran caudal de gente a favor de la fórmula Fernández-Fernández generó una expectativa “positiva” pero se vio asociada a la contra-expectativa del desorden “que se produce y nos pone en un sufrimiento permanente”.
Ambrosino explica que “esperar algo mejor fue cortado abruptamente por el desorden, a nuestra gente no le alcanza y esta semana le alcanza un 20% menos“.
Vivir con dos asignaciones familiares
Desde el Movimiento “Los Sin Techo” explican que a las familias que asisten cuentan como único ingreso fijo la Asignación Universal por Hijo, “las AUH es lo único que cobran”, dice Ambrosino y explica que desde el mes de marzo perciben $2021 por hijo, ese montó está congelado hasta septiembre. “Es inexplicable cómo vivir. Ahí se explica cuando la gente toma caminos semiviolentos para poder comer“, intenta justificar.
La ayuda del Estado se contrasta con los propios datos que recavan. Según el movimiento, una familia de padres y dos hijos necesitaba $12500 a fines de junio solo para comer. “Con la asignación por hijo, que en promedio son dos y medio por familia , le falta la mitad para acceder al primer derecho básico que es la comida”, dice Ambrosino.
2000 ranchos en la ciudad
En un relevamiento realizado por la ONG observan que en Santa Fe “estamos por los 2000 ranchos” con todo lo que esa expresión conlleva.
Se trata de casas de chapa, algunas maderas precarias, piedras para sostener las chapas en los techos y retazos de nylon para evitar filtraciones de agua cuando llueve.
Ambrosino destacó que vivir en un rancho es sinónimo de prehistoria, “se calefaccionan con resistencias y no puede pasar eso, de allí se desprende la precariedad en la salud por las intoxicaciones e incendios accidentales que sufren casi a diario”.
