Colón: imputarán a los 8 detenidos vinculados a los “aprietes” al plantel profesional

Dos son dirigentes del club y seis son integrantes de una de las facciones de la barra. 


Fuentes del Ministerio Público de la Acusación informaron que este miércoles imputarían a los ocho detenidos en los allanamientos de este lunes ordenados por la justicia en el marco de los aprietes de barras a jugadores de Colón

Se trata de dos dirigentes del club, el vicepresidente Horacio Darrás y el vocal Lucas Paniagua. Los restantes seis son integrantes de una de las facciones de la barra de Colón, entre ellos el líder de Los de Siempre Orlando “Nano” Leiva.

Las órdenes de allanamiento fueron ordenadas por la Unidad Fiscal de Delitos Complejos de la Fiscalía Regional 1 y se llevaron a cabo con la correspondiente autorización judicial.

De acuerdo con lo relevado hasta este lunes a la tarde, se logró el secuestro gran cantidad de indumentaria oficial (sin uso y en las bolsas de fábrica) del Club Atlético Colón; numerosos carnets de socio de la institución (que no eran de quienes los tenían en su poder); un arma de fuego y teléfonos celulares.

Además, en uno de los domicilios allanados secuestro marihuana, y en otro cocaína; a raíz de los estupefacientes secuestrados, se informó a la Justicia Federal.

En esas dos viviendas, también se secuestró dinero en efectivo. Por otra parte, también se secuestró una campera y un vehículo (Renault Kwid) que serían de uno de los detenidos, y que son de interés para la investigación.

El martes por la tarde, el plantel de Colón que se encontraba en el predio 4 de junio para entrenar, fue apretado por la barra brava.

Entre 25 y 30 individuos irrumpieron en el entrenamiento y allí mantuvieron una acalorada discusión con algunos de los referentes. Incluso hubo empujones e insultos, además de amenazas a los jugadores, como así también a sus familiares.

Sin embargo, la dirigencia que encabeza el presidente José Vignatti no se expresó públicamente frente a un hecho tan grave y el paso de las horas encontró únicamente el silencio y un fiscal decidió actuar de oficio.

Recién luego de 48 horas del mal momento que vivieron los jugadores, la comisión directiva resolvió emitir un comunicado repudiando el accionar de los violentos.