En una jornada histórica para Unión de Santa Fe, Héctor Desvaux, candidato a presidente por la agrupación Encuentro Unionista, emitió su voto este sábado en el colegio IPEI, donde se desarrollan las elecciones institucionales del club. Acompañado por integrantes de su equipo, Desvaux se mostró tranquilo y satisfecho tras una campaña intensa y enfocada en el contacto directo con el socio.
“Es un día muy importante para el club. Hay una proyección muy alta de votantes, lo cual habla de un socio que quiere participar y decidir. Eso es muy bueno”, señaló el referente opositor tras cumplir con su deber cívico.
Por primera vez como candidato, Desvaux vivió el momento con una mezcla de emoción y compromiso: “Estamos todos ansiosos, pero también muy tranquilos. Venimos con un proyecto serio, trabajado, y ahora será el socio quien decida lo que cree conveniente para el futuro del club.”
Las elecciones, que se desarrollan con normalidad en la sede de López y Planes 3513, continuarán hasta las 18 horas. Están habilitados para votar más de 12.500 socios, distribuidos en 22 mesas, incluida una exclusiva para vitalicios. Para sufragar es obligatorio presentar DNI físico y haber cumplido con los requisitos establecidos por el club.
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Desvaux también dirigió un mensaje a quienes aún no se acercaron a votar: “Que se animen, que vengan. Esto se trata de decidir el destino del club. Cuantos más participen, más fuerte será el resultado. Y eso es lo que Unión necesita.”
En relación a la campaña, expresó su satisfacción: “Mostramos todo, no nos guardamos nada. Las ideas están sobre la mesa. Ahora ya no se trata de discursos, sino del voto de cada socio.”
Finalmente, valoró el hecho de que la elección se esté desarrollando entre dos propuestas bien definidas: “Tener dos listas claras, con ideas distintas, ayuda al socio a decidir. Hay dos visiones sobre cómo gestionar y proyectar Unión, y eso moviliza.”
Con la expectativa propia de un momento decisivo, Desvaux cerró con una metáfora futbolera: “A esperar… y a comerse un poco las uñas. Esto es como un partido, hasta que no pite el árbitro, no se sabe nada. Pero estamos bien, con la sensación de haber hecho todo lo que había que hacer.”
La decisión está en manos del socio tatengue. Cada voto cuenta en una jornada que puede marcar un nuevo rumbo para la institución.
