La inflación de abril marcó un 2,8% y reactivó el optimismo del Gobierno en su camino hacia el “costo de vida cero” prometido por el presidente Javier Milei para mediados de 2026. Con una fuerte desaceleración en las primeras dos semanas de mayo, el mes podría convertirse en el de menor inflación desde el inicio de la gestión.
Consultoras privadas como EcoGo y Equilibra detectaron una inflación semanal del 0,4% y una deflación del 0,2% respectivamente, impulsadas por una baja sostenida en alimentos frescos y por el impacto de promociones como el Hot Sale. La fuerte caída en los precios de verduras y frutas lideró la tendencia, aunque las recientes inundaciones podrían revertirla en las próximas semanas.
En paralelo, el Gobierno sostiene el congelamiento de tarifas de servicios públicos hasta después de las elecciones de octubre, y el ministro de Economía, Luis Caputo, mantiene el control sobre las listas de precios de productos de consumo masivo. Además, la decisión de Aluar de reducir un 25% el valor del aluminio —insumo clave en diversas cadenas productivas— refuerza la estrategia oficial para desacelerar el índice de precios.
La consultora Analytica ya anticipa que junio podría cerrar con una inflación del 1,8%, lo que marcaría un nuevo mínimo en la administración Milei. Desde Casa Rosada aseguran que el objetivo es perforar el 1% en la segunda mitad del año.
El dólar, por ahora, colabora con la meta. La cotización oficial se mantiene cerca del piso de la banda cambiaria, fijada este mes en 990 pesos. Según economistas, si el Gobierno logra sostener las anclas fiscal y monetaria, el escenario inflacionario seguirá mejorando.
En los primeros cuatro meses del año, el índice de precios acumuló un 11,6%. Con estas proyecciones en marcha, algunos analistas ya comienzan a estimar una inflación anual por debajo del 40%, muy por debajo de las cifras heredadas.





