Luego de la derrota 1-0 frente a Platense en la semifinal de los playoffs del Torneo Apertura 2025, Miguel Ángel Russo se presentó en conferencia de prensa con el rostro serio y palabras medidas. Más allá del golpe deportivo, todas las miradas estaban puestas en su futuro al frente de San Lorenzo, especialmente tras los rumores que lo vinculan con Boca Juniors. Sin embargo, el técnico decidió no dar definiciones.
“Hoy no voy a hablar de mi continuidad en San Lorenzo. No tengo por qué hablar. Voy a hacerlo cuando yo lo diga y quiera, y cumpla con todo lo que tenga que pasar”, expresó Russo, sin confirmar ni desmentir posibles negociaciones con el club de la Ribera.
El DT de 68 años evitó la polémica y se centró en el momento emocional que atraviesa tras la eliminación: “Me invade la derrota y el dolor… el grupo, muchos chicos”. Hizo hincapié en el esfuerzo de un plantel joven y en formación, que alcanzó instancias decisivas a pesar de los vaivenes del semestre.
Consultado nuevamente por los rumores, Russo fue tajante: “Todo lo que digan de mí no lo escucho. Te respondo así”.
Más allá del resultado, el entrenador rescató lo construido durante el certamen: “Me quedo con un buen grupo que se superó mucho”, afirmó. Y, en una reflexión personal, recordó un episodio que marcó su carrera: “Hoy es duro mantener todo. Fijate que me pasó en Central… uno que tiró una piedra me arruinó todo. De ahí hasta después tuve un cambio muy grande”.
Con esta declaración, Russo dejó entrever el peso emocional que conlleva la alta competencia y la fragilidad de los proyectos en contextos cargados de presión. Su futuro en San Lorenzo sigue siendo incierto, pero su silencio y su mensaje sugieren que las definiciones no tardarán en llegar.





