Hay fechas que no necesitan calendario. El 4 de junio de 2021 quedó tatuado en el alma rojinegra como el día en que Colón tocó el cielo con las manos. Fue en San Juan, pero se sintió en cada rincón de Santa Fe, en cada casa, en cada lágrima contenida durante generaciones. Aquella noche, el sabalero alcanzó lo que tanto soñó: su primer título oficial, con una goleada inolvidable ante Racing por la final de la Copa de la Liga Profesional.
El partido no fue una final más. Fue una función de gala. Colón, diezmado por lesiones, dejó el alma en cada jugada. Y cuando la pelota empezó a hablar, habló sabalero: a los 12’ del segundo tiempo, Rodrigo Aliendro abrió la puerta del sueño; a los 26’, Christian Bernardi encendió la locura con una joya picándola por encima del arquero; y a los 40’, Alexis Castro puso el moño con una definición serena, mágica, como quien sabe que la historia lo espera.
Fue raro festejar sin abrazos en las tribunas, con las gradas vacías por la pandemia. Pero la emoción no entiende de protocolos. Venía acumulada desde Paraguay, desde aquella final bajo la lluvia en Asunción que no se pudo ganar, pero que encendió un fuego que ya no se apagó. La derrota en la Sudamericana 2019 fue la antesala del desahogo. No hay estrella sin esa noche de frustración, dicen muchos. Porque esa herida forjó el temple de un equipo maduro, sereno, sabio.
Eduardo Domínguez fue el faro. Con él, Colón se plantó sin apuro, sin desesperación. Dejó que el fútbol hiciera su trabajo y cuando tuvo que pegar, lo hizo con categoría. Aquel Racing llegaba como favorito, pero Colón lo borró de la cancha. No solo ganó: enseñó.
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Cuatro años después, los hinchas siguen recordando ese día como si hubiera sido ayer. Porque cuando un pueblo espera tanto, el recuerdo no se desvanece: se vuelve eterno. Y esa estrella que brilla sobre el escudo no es solo un título. Es una promesa cumplida, un legado imborrable, una emoción que no caduca.
Colón campeón. Colón eterno. Porque hay noches que no se olvidan. Y la del 4 de junio de 2021 será, para siempre, una de ellas.
