Un estremecedor episodio conmocionó este viernes al mediodía a la ciudad de Rosario: empleados del Centro Ambiental de Tratamiento de Residuos encontraron el cuerpo sin vida de un bebé recién nacido entre los desechos sanitarios de la planta ubicada en Las Palmeras y Uriburu.
El hallazgo fue realizado por trabajadores que operaban la cinta de separación de residuos. Según informaron fuentes policiales, el cadáver fue detectado dentro de un bolso, envuelto en una toalla ensangrentada. En el mismo paquete también estaba la placenta, lo que indicaría que el bebé había nacido recientemente.
Tras un llamado al 911, personal del Comando Radioeléctrico de Pérez se presentó en el lugar y notificó de inmediato a la Fiscalía. El médico policial que examinó el cuerpo determinó que se trataba de un bebé nacido a término, con una data de muerte de entre 12 y 24 horas. Además, se constató que tenía dos vueltas del cordón umbilical alrededor del cuello, por lo que se presume que habría muerto por estrangulamiento.
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La fiscal Valeria Piazza Iglesias tomó intervención en la causa y ordenó una serie de medidas para esclarecer el hecho, entre ellas la autopsia del cuerpo y el análisis de las cámaras de seguridad de la planta y de las zonas por donde habría circulado el camión que transportó los residuos.
Desde la planta se activó de inmediato el protocolo previsto para este tipo de situaciones y se dio aviso a las autoridades. La investigación continúa para determinar la identidad de la madre y si hubo participación de terceros en la muerte del recién nacido.
