En su mensaje dominical desde el Palacio Apostólico, el papa León XIV hizo un firme llamado a los líderes del mundo para que pongan fin a los conflictos armados y trabajen en la construcción de un futuro de paz. El Pontífice expresó su profunda preocupación por la situación humanitaria en Gaza, así como por los enfrentamientos en la frontera entre Tailandia y Camboya y el sur de Siria.
“Toda persona humana tiene una dignidad intrínseca conferida por Dios”, afirmó el Papa, e instó a las partes involucradas a cesar las acciones violentas y respetar el derecho humanitario.
Con especial énfasis, se refirió a la crisis en Gaza: “La población civil está aniquilada por el hambre y expuesta a la violencia y la muerte. Renuevo mi sincero llamamiento al alto el fuego, a la liberación de los rehenes y al respeto del derecho humanitario”, concluyó.
El Pontífice también tuvo palabras específicas para los afectados por la violencia en la frontera entre Tailandia y Camboya, en especial por “los niños y las familias desplazadas”, y pidió que “el Príncipe de la Paz inspire a todos a buscar el diálogo y la reconciliación”. Asimismo, elevó sus oraciones por las víctimas de los enfrentamientos en el sur de Siria.





