La empresa Mercado Libre respondió con dureza al ministro de Economía de Santa Fe, Pablo Olivares, luego de que este la señalara por el aumento del costo operativo en la provincia debido a la suba de Ingresos Brutos, e incluso la vinculara con el narcotráfico.
En un comunicado, la firma fundada por Marcos Galperin expresó que las declaraciones del funcionario «buscan desviar la discusión con acusaciones infundadas» y no abordan el verdadero problema: el impacto de la Ley Fiscal 2025, que eleva la presión impositiva sobre las actividades comerciales en la provincia.
“Difamar no baja Ingresos Brutos”, sentenció Mercado Libre, remarcando que la decisión de política tributaria es potestad de cada provincia. Además, sostuvo que “el cobro de este impuesto encarece la actividad de miles de emprendedores, PyMEs y comercios que trabajan todos los días para hacer crecer la economía local”.
En ese sentido, la empresa señaló que su objetivo es transparentar el impacto de estos tributos en las operaciones de los usuarios, para que comprendan cómo los impuestos locales inciden en sus costos y en su competitividad.
La tensión escaló luego de que el ministro Olivares afirmara que el comunicado de la empresa era una “represalia” y la acusara de facilitar operaciones del narcotráfico, señalando que en varios búnkeres de droga se encontraron dispositivos de Mercado Pago.
Desde la compañía respondieron que trabajan activamente con autoridades de todos los niveles para prevenir delitos y garantizar la trazabilidad de las operaciones digitales. Subrayaron que aplican herramientas de tecnología e inteligencia de datos para detectar y sancionar conductas ilegales, y que colaboran a diario con fuerzas federales, provinciales y municipales.
“En Santa Fe desarrollamos un plan de capacitación junto a las autoridades y la Policía de Investigaciones en mayo de este año”, detallaron.
Finalmente, Mercado Libre insistió en que se necesita un diálogo serio y responsable sobre la estructura impositiva, evitando caer en “acusaciones sin fundamento” que, según la empresa, sólo desvían la atención de los problemas reales que enfrenta la economía regional.
