En un partido con pocas emociones pero mucha tensión, San Lorenzo logró avanzar a los octavos de final de la Copa Argentina al vencer por penales a Quilmes, tras igualar sin goles en los 90 minutos. El encuentro se disputó en el Estadio Néstor Díaz Pérez, de Lanús, y tuvo como nota destacada el debut oficial de Damián Ayude en el banco del Ciclón y de Aldo Pedro Duscher en el del Cervecero.
El partido fue trabado y con pocas situaciones claras. Quilmes buscó un juego directo, pero el equipo azulgrana cortó constantemente en mitad de cancha con reiteradas infracciones. La chance más clara para San Lorenzo llegó en el primer tiempo, cuando Esteban Glellel cometió penal sobre Andrés Vombergar. El propio delantero ejecutó el disparo, pero el arquero se lució y evitó la apertura del marcador.
Con el envión de la atajada, Quilmes tuvo sus mejores momentos, aprovechando los espacios de una defensa de San Lorenzo adelantada. A los 68 minutos, el equipo del sur quedó con 10 hombres por la expulsión de Agustín Bindella, quien recibió la segunda amarilla tras una falta a Ezequiel Cerutti, en ambas ocasiones el “Pocho” fue víctima.
A pesar de la desventaja numérica, Quilmes se replegó bien y no sufrió demasiado ante un San Lorenzo que mostró limitaciones ofensivas. Sin goles al final del tiempo reglamentario, la clasificación se definió desde el punto penal.
En la tanda, ambos equipos comenzaron efectivos, y Vombergar pudo sacarse la espina convirtiendo su remate. Sin embargo, el quiebre llegó cuando Orlando Gill le atajó el disparo a Gabriel Aranda. Luego convirtieron Ezequiel Herrera y Elías Báez, y finalmente Francisco Flores falló su penal, dándole la clasificación al conjunto azulgrana.
Ahora, San Lorenzo enfrentará a Tigre en los octavos de final. El Matador viene de dejar en el camino a Banfield, al que derrotó 2-0. El Ciclón, por su parte, ya había eliminado previamente a Sportivo Las Parejas también por penales.





