Los jugadores argentinos Imanol Machuca y Facundo Garcés fueron suspendidos por un año por la FIFA por supuesta falsificación de documentos para jugar con la selección de Malasia, junto al delantero Rodrigo Holgado.
La FIFA aplicó este viernes suspensiones de 12 meses y multas de 2.000 francos suizos a los jugadores involucrados en el partido de la tercera ronda de clasificación para la Copa Asiática AFC Arabia Saudita 2027, jugado el 10 de junio de 2025 contra Vietnam. La sanción se enmarca en infracciones al artículo 22 del Código Disciplinario, relacionadas con la presentación de documentación manipulada por la Federación de Malasia para alinear a los jugadores.
Otros jugadores sancionados por la misma causa son Gabriel Felipe Arrocha, João Vitor Brandão Figueiredo, Jon Irazábal Iraurgui y Héctor Alejandro Hevel Serrano.
Opinión autorizada
Carlos Iparraguirre, especialista en derecho deportivo y miembro del CADDE, explicó en EME Deportivo que la situación está vinculada a la elegibilidad de los jugadores para representar a una selección nacional: «La posibilidad de tener más de una nacionalidad y poder jugar en una selección, la FIFA lo denomina Elegibilidad. Son las condiciones de elegibilidad para representar una selección nacional. Sin nacionalidad no hay Elegibilidad».
Sobre la sanción, agregó: «No me imagino a Garcés ni a Machuca falsificando documentos. Es lo que supongo. No hay una responsabilidad objetiva como en los casos de dopaje. En este caso, al hablar de falsificación de documentos, tiene que haber una actitud dolosa con la intención de concretar este hecho».
Iparraguirre detalló que los jugadores tienen 10 días para solicitar los fundamentos de la resolución y que, si pueden demostrar que no cometieron ilícito, podrían recuperar su derecho a jugar y representar a la selección malaya.
Además, señaló: «La selección malaya quiso armarse un plantel y buscó intermediarios para que le vayan a buscar los jugadores. Esto no significa que los futbolistas tengan culpa directa».
Sobre la relación con los clubes, sostuvo: «Los clubes no pueden actuar directamente, pero están a disposición de los jugadores. Están preocupados porque quieren contar con ellos y deberán apoyarlos jurídicamente».
Finalmente, Iparraguirre puntualizó sobre las normas de FIFA respecto a la nacionalidad: «De acuerdo a la norma, un bisabuelo no es lo mismo que un abuelo para FIFA. También dependerá de las normativas nacionales. Mientras que la Federación malaya había consultado previamente a FIFA y no cumplió con los requisitos. Si los jugadores pueden demostrar que no han cometido ningún ilícito, podrán representar a esa selección y volver a jugar».
