La Unión Cívica Radical definirá este viernes a su próximo presidente partidario, en reemplazo de Martín Lousteau, y en las últimas horas tomó fuerza un nombre que hasta ahora se mantenía por fuera de las apuestas iniciales. Se trata de Leonel Chiarella, intendente de Venado Tuerto y vicepresidente del radicalismo santafesino, quien emerge como el principal candidato luego de que Gustavo Valdés desistiera de competir.
Los 106 delegados nacionales se reunirán desde las 14 en la sede del Comité Nacional, ubicada en Alsina 1786, en la Ciudad de Buenos Aires, donde buscarán zanjar una conducción que aparece atravesada por tensiones internas y un complejo escenario político para el radicalismo.
Chiarella, de 36 años, cosechó apoyos en distintos espacios internos al no estar asociado a ninguna de las tribus que pujan por el control partidario. Desde Evolución —sector que lidera Lousteau— hasta referentes del pullarismo santafesino y el moralismo jujeño ven en su figura una salida de consenso frente a la falta de entendimiento entre los sectores más oficialistas y los más opositores.
La posibilidad de un recambio generacional fue celebrada incluso por algunos dirigentes nacionales. El diputado Pablo Juliano escribió en sus redes: “Si se confirma lo que anda dando vuelta, mañana puede ser un gran día para los que no especulamos y jamás dejamos de creer”.
La elección llega en un momento crítico para la UCR. Tras el flojo desempeño electoral de octubre, el bloque radical “puro” en la Cámara de Diputados quedó reducido a seis integrantes, mientras que otros legisladores migraron hacia Provincias Unidas o formaron bloques unipersonales. Esta fragmentación contrasta con la fuerza territorial que el partido aún conserva en provincias como Corrientes, Santa Fe, Mendoza, Jujuy y Chaco, además de numerosas intendencias.
Valdés, que era considerado el candidato natural para conducir el Comité Nacional, decidió declinar para evitar sumergirse en una disputa interna desgastante. Ese movimiento habilitó la irrupción de Chiarella como figura de consenso. El santafesino acumula respaldo político y resultados electorales contundentes: en 2023 fue reelecto con un 83% de los votos, uno de los porcentajes más altos del país, y su gestión es bien valorada en su distrito.
Con este escenario, todo indica que Chiarella aparece como la opción más firme para asumir la presidencia del centenario partido. La confirmación llegará en las próximas horas, cuando los delegados definan finalmente la nueva conducción de la UCR.






