Ante las reiteradas quejas de vecinos de avenida Galicia y Güemes por picadas, música alta, consumo de alcohol en la vía pública y ocupación de veredas, el intendente Juan Pablo Poletti confirmó que el municipio intensificará los operativos nocturnos en la zona. El mandatario reconoció que el desorden “se volvió una constante los fines de semana” y recordó que el municipio ya viene interviniendo en distintos puntos de la ciudad, como el Faro, Las Flores y Aristóbulo del Valle. Solo el pasado fin de semana, se retuvieron 170 motovehículos.
Poletti afirmó que la intención es sostener y profundizar estas acciones: “Vamos a seguir reteniendo a aquellos que no saben convivir, que siguen desafiando a las autoridades. Vamos a trabajar con Provincia en acciones conjuntas”. Además, anticipó que el municipio ya prepara operativos específicos para las celebraciones de fin de año. “Queremos una ciudad donde se pueda disfrutar con amigos, pero respetando al vecino”, remarcó.
En cuanto al consumo de alcohol en la vía pública, el intendente anunció que habrá controles más estrictos sobre la venta y advirtió que las clausuras serán inmediatas en caso de incumplimientos. Aunque reconoció que muchas compras se realizan dentro del horario permitido, señaló que los principales problemas surgen luego: “Lo que genera conflicto es la música alta, la mugre y la suciedad”.
Poletti insistió en que la convivencia debe ser la regla y recordó que Santa Fe cuenta con numerosos espacios para reunirse sin afectar a otros: “Tenemos una costanera muy bella, plazas y lugares para disfrutar. Lo que no corresponde es hacerlo en la puerta de un vecino que se levanta a las cinco de la mañana a trabajar”. En esa línea fue categórico: “Aquel que no lo entienda, se secuestrará o el equipo de música o el auto o la moto”.
También se refirió a los festejos de recibidas y al vandalismo que afecta espacios emblemáticos de la ciudad, como letras corpóreas y puntos turísticos. “Es una alegría enorme que alguien se reciba, pero la ciudad es de todos”, expresó. Sostuvo que los actos de suciedad y daño al mobiliario urbano perjudican tanto a vecinos como a visitantes y pidió responsabilidad: “No lo hacemos en la puerta de nuestra casa. Hay lugares donde tirar harina o huevo y después limpiar. No puede ser en la vereda de un vecino ni dañando espacios que son símbolo de Santa Fe”.
Finalmente, el intendente llamó a disfrutar con responsabilidad: “El mensaje es disfrutemos, pero respetemos también al que no tiene nada que festejar ese día”.





