El expresidente de Ecuador Rafael Correa ha reaccionado a la detención del activista Julian Assange y ha arremetido contra el actual presidente de la república, Lenín Moreno, por permitir que la Policía británica accediera a la embajada ecuatoriana para arrestar al fundador de Wikileaks.
El exmandatario ha querido precisar que «no es Rafael Correa el que da el asilo a Julian Assange; es el Estado ecuatoriano».
Correa ha destacado en ese sentido que su país «tenía la obligación, de acuerdo al Derecho internacional, de acuerdo al propio orgullo nacional, de proteger a su asilado». El expresidente denuncia asimismo que las autoridades ecuatorianas han permitido que «una policía extranjera entre en la embajada de Ecuador» para «capturar» al activista.





