Ariel Acosta fue acusado por dos defraudaciones por casi 200 mil pesos y otras tres maniobras que no pudo concretar.
Un ex policía quedó preso acusado de estafas y por la tenencia ilegal de armas y explosivos. Ariel Darío Acosta fue acusado de haber engañado a personas con quienes simulaba negociaciones en las que invocaba el nombre de una distribuidora de la ciudad para que les transfirieran dinero. Al menos dos defraudaciones perjudicaron a las víctimas por unos 100 mil pesos pero otras maniobras quedaron en el intento.
El fiscal de Delitos Económicos Mariano Ríos imputó a Acosta por cinco hechos de estafa, tres de ellos en tentativa, y por tenencia simple de un arma de fuego, de bombas y de materiales para crear explosivos. La jueza Hebe Marcogliese le dictó prisión preventiva por 60 días.
Detenido
Destituido tiempo atrás como suboficial de la policía santafesina, Acosta fue detenido el miércoles pasado por personal de la Agencia de Control Policial (ex Asuntos Internos) en un allanamiento ordenado por Ríos en su domicilio de Pellegrini al 1400. En la vivienda se secuestraron una pistola calibre 40 Smith & Weeson con numeración, tres teléfonos celulares y 117 mil pesos. En la requisa también se hallaron una bomba de humo, una bomba molotov de fabricación casera, una caja fuerte cerrada, una notebook, 25 cartuchos de escopeta, cinco cartuchos calibre 9 milímetros y cuatro blisters con chips para telefonía.
Ante la posibilidad de que en el allanamiento se encontraran drogas, se convocó a personal de Dicrin AIC (ex Drogas Peligrosas) que secuestró tres balanzas digitales de precisión con aparentes vestigios de cocaína. Por ese motivo el ex policía quedó detenido por presunta infracción a la ley de estupefacientes y a disposición de la Justicia federal.
En cuanto a la investigación de la Justicia provincial, Acosta fue imputado el sábado por los hechos de defraudación, entre otros delitos. El ardid revelado por Ríos en esa audiencia consistía en “utilizar el nombre de una distribuidora real de Rosario y simular negociaciones con las víctimas para hacer que les transfieran dinero a su cuenta bancaria”. En ese sentido el fiscal detalló que a una de las víctimas la defraudó el pasado 7 de abril por 107.490 pesos, mientras que el 12 de ese mismo mes estafó a otra en 90 mil pesos.
Ríos expuso que Acosta intentó defraudar a otras tres personas con la misma maniobra entre enero y abril. Pero en esos casos las víctimas se comunicaron con la empresa antes de concretar el pago y así supieron que se trataba de una estafa.
En cuanto a la tenencia “sin debida autorización legal desde un momento anterior no determinado”, el ex policía fue imputado por el hallazgo en su poder durante el allanamiento a su casa de Pellegrini al 1400 de una Pistola Smith & Wesson con número de serie, una granada de gas lacrimógeno plateada, una bomba de estruendo de fabricación casera marrón envuelta en cinta adhesiva transparente y mecha de ignición.
Fuente: La Capital