En el marco de la causa que investiga una red de extorsiones y favores judiciales encabezada por el exjuez federal de Rosario Marcelo Bailaque, efectivos de Gendarmería Nacional allanaron este miércoles cuatro domicilios vinculados al operador judicial y escribano santafesino Santiago Busaniche, tanto en la ciudad de Santa Fe como en Buenos Aires.
Los procedimientos fueron ordenados por el juez de Garantías Eduardo Rodríguez Da Cruz, a pedido del Ministerio Público Fiscal, y tuvieron como principal objetivo el secuestro del teléfono celular de Busaniche, considerado una pieza clave en la investigación. Según fuentes judiciales, en el celular del exjefe de la AFIP Rosario y Santa Fe, Carlos Vaudagna, ya analizado por los peritos, se hallaron conversaciones entre ambos que mencionan movimientos vinculados a maniobras presuntamente extorsivas.
Una trama de extorsión y favores
De acuerdo con la investigación, en esos intercambios aparecen referencias a la causa iniciada en el juzgado de Bailaque contra el financista Claudio Iglesias, quien habría sido extorsionado a partir de una denuncia anónima falsa presentada ante la AFIP en 2019. Esa denuncia derivó en allanamientos y en una supuesta maniobra destinada a perjudicarlo dentro de la empresa San Cristóbal Seguros.
Los fiscales sostienen que Iglesias habría sido presionado para pagar unos 200.000 dólares a cambio de ser sobreseído en el expediente, que tramitaba directamente en el despacho de Bailaque sin intervención de la fiscalía.
A la par de los allanamientos a Busaniche, Gendarmería también ingresó en la sede de la constructora Edeca, investigada por el traspaso irregular de un terreno que habría terminado en manos de un familiar de Bailaque.
Quién es Santiago Busaniche
Busaniche, escribano y operador judicial nacido en Santa Fe, es conocido por sus vínculos con figuras del poder político y judicial, y por su cercanía con el entorno del fallecido exgobernador Carlos Reutemann. Su nombre genera recelo en el ámbito judicial, donde se le atribuyen contactos de alto nivel y un papel decisivo en causas federales sensibles.
Según la pesquisa, Busaniche habría intervenido en distintas etapas de la maniobra: primero impulsando los allanamientos contra Iglesias, y luego ordenando a Vaudagna que facilitara documentación de la AFIP favorable al financista, con el objetivo de que pudiera recuperar parte del dinero secuestrado y cumplir con los pagos exigidos en la extorsión.
Avances paralelos en la investigación
La causa también involucra al empresario Guillermo Whpei, quien —según trascendió— mantiene conversaciones con los fiscales para declarar como arrepentido, aunque su decisión aún no se concretó.
En paralelo, la investigación alcanzó al juez federal Gastón Salmain, señalado por presuntas irregularidades en concursos judiciales y por favorecer de manera sistemática a ciertos estudios jurídicos en causas previsionales. La Corte Suprema, a instancias de su presidente Horacio Rosatti, dispuso una investigación disciplinaria en el Consejo de la Magistratura.
El expediente, que revela una trama de poder, extorsión y tráfico de influencias en la justicia federal, continúa avanzando con nuevas pericias sobre los dispositivos secuestrados. Los investigadores sostienen que el análisis del teléfono de Busaniche podría aportar pruebas determinantes para esclarecer el alcance de la red y el rol de cada uno de los involucrados.





