En Rosario, el Festival Bandera reunió a más de 25.000 personas en el Hipódromo, generando demanda en alojamiento, gastronomía y transporte. Además, el Festival Palau convocó a 90.000 asistentes el viernes 31 de octubre y a más de 220.000 el sábado 1 de noviembre, en el Monumento Nacional a la Bandera, totalizando 310 mil personas.
En la ciudad de Santa Fe, el flujo turístico estuvo vinculado al Turismo Carretera en Paraná, con efecto derrame sobre la hotelería, la gastronomía y los servicios locales.

Desde el Ministerio de Desarrollo Productivo, a cargo de la Secretaría de Turismo, se destacó el trabajo articulado con municipios, prestadores y organizadores para garantizar condiciones adecuadas de recepción y servicios. “Con estos eventos no solo se moviliza la economía, también se fortalece la identidad territorial y la capacidad de Santa Fe para recibir a miles de visitantes con infraestructura y servicios de calidad”, señaló el titular de la cartera productiva, Gustavo Puccini.
El funcionario también afirmó que “los indicadores registrados permiten proyectar un cierre de año con niveles sostenidos de actividad turística en toda la provincia y un verano en el que, una vez más, Santa Fe vuelva a mostrar todo su potencial de riquezas naturales y culturales”





