¡Adiós drama! 5 comedias de Netflix para volver a ver

Arrancan los días de frío y te damos 5 excusas para no moverte de la cama.

Simplemente no te quiere

Es una típica comedia con reparto coral con distintos relatos que se van cruzando. Tiene a Ben Affleck, Jennifer Aniston, Drew Barrymore, Jennifer Connelly, Scarlett Johansson, Bradley Cooper, Justin Long, Ginnifer Goodwin y Kevin Connolly entre sus protagonistas. La historia principal de la película trabaja sobre la hipótesis de que los hombres son más directos a la hora del amor, que no se manejan con mensajes ocultos ni hay doble sentido en sus acciones. Sin embargo, también afirma que en cuestiones del corazón nunca hay reglas.

No me olvides

Reese Witherspoon es Melanie Carmichael, una diseñadora de indumentaria súper prestigiosa que lleva una vida snob en Nueva York y se compromete con uno de los soltero más codiciados de la Gran Manzana, el hijo de la alcaldesa, interpretado por el lindo de Patrick Dempsey. El problema es que para llevar adelante la boda necesita volver a su Alabama natal y conseguir el divorcio de su primer marido, un sureño que nunca quiso abandonar el pueblo y que todavía tiene sentimientos por ella.

La muerte le sienta bien

Una comedia de humor negro bizarra con actuaciones antológicas de Meryl Streep, Goldie Hawn y Bruce Willis. Se estrenó en 1992 y la crítica la destrozó. Pero es un clásico que nadie debería dejar de ver. Aunque el abordaje es casi una parodia, la película tiene una mirada bastante cínica sobre la obsesión con la belleza y la búsqueda de la eterna juventud.

Damas en guerra

Es una de las mejores películas de Judd Apatow (Virgen a los 40, Ligeramente embarazadaGirls). Protagonizada por Kristen Wiig, Maya Rudolph y Melissa McCarthy, el film explora con humor y acidez el misterio de los vínculos femeninos. Y lo hace desde un lugar poco edulcorado y bastante honesto.

La boda de mi mejor amigo

Julia Robert es Julianne Potter, una periodista gastronómica que está enamorada de su mejor amigo (Dermot Mulroney). El problema es que se da cuenta de esto justo en el momento en que él la llama para contarle que está a punto de casarse con otra (Cameron Diaz). Julianne tiene 72 horas para sabotear la boda y va a hacer hasta lo imposible por lograrlo. Lo curioso de esta película es que Julia hace el papel de protagonista y antagonista a la vez.