Los cancilleres de Perú y Bolivia discuten alternativas a la Unasur

Los cancilleres de Perú, Néstor Popolizio, y Bolivia, Diego Pary, conversaron el jueves en Lima sobre alternativas a la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), que está paralizada por la crisis en Venezuela, informó el gobierno peruano.

Ambos cancilleres “dialogaron sobre el futuro de los diversos procesos de la integración regional, subrayando el trabajo de la presidencia pro-témpore del Perú en la Comunidad Andina y las posibles alternativas a la situación que atraviesa Unasur”, señaló la cancillería peruana

En su reunión en el Palacio de Torre Tagle de Lima, Popolizio y Pary abordaron igualmente temas de la agenda bilateral en el ámbito político, económico y comercial, dijo la cancillería en un comunicado.

La construcción de un ferrocarril bioceánico, que vincule al Atlántico brasileño con el Pacífico peruano vía Bolivia, es desde hace meses uno de los puntos destacados de esa agenda bilateral.

La Paz también busca conseguir condiciones comerciales favorables para las exportaciones bolivianas en puertos de Perú, de cara a prescindir de los puertos chilenos que usa actualmente.

La cancillería no mencionó las alternativas barajadas por ambos ministros para la Unasur, que atraviesa una crisis terminal debido a la situación en Venezuela.

Chile impulsa desde febrero la creación de Prosur, un nuevo organismo sudamericano para reemplazar a la Unasur.

La fundación de un nuevo organismo regional comenzó a tomar fuerza el pasado febrero en una reunión en Chile sobre “integración sudamericana” en la que participaron representantes de todas las naciones de la zona, con excepción de Venezuela.

“Nuestra propuesta es crear un nuevo referente en Sudamérica (Prosur) para una mejor coordinación, cooperación e integración regional, libre de ideologías, abierto a todos y 100% comprometido con democracia y DDHH (derechos humanos)”, escribió el presidente chileno Sebastián Piñera en su cuenta oficial de Twitter.

Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú suspendieron su participación en Unasur, que comenzó a funcionar en 2011 bajo el impulso de los entonces presidentes Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil) y Hugo Chávez (Venezuela) para contrarrestar la influencia de Estados Unidos en la región.

Los países seguirán apartados hasta que sea elegido un nuevo secretario general en reemplazo del colombiano Ernesto Samper, quien terminó su mandato en enero de 2017. Desde entonces, está prácticamente paralizada.

Venezuela, que vive una crisis económica y política sin precedentes, se negó a reconocer la designación del argentino José Octavio Bordón como nuevo secretario general, por lo que el puesto quedó vacante desde entonces.

En agosto pasado, el presidente colombiano Iván Duque anunció la salida de su país de Unasur, poniendo una nueva piedra en la tumba de esta institución que nació con el propósito de construir una identidad y ciudadanía suramericanas y desarrollar un espacio regional integrado.

Integrada por los 12 países sudamericanos, Unasur representaba a 388 millones de personas y un PIB conjunto de 1,9 billones de dólares.