Un implante para aumentar los labios le causó una fuerte reacción alérgica

Christina Burton fue internada porque no podía comer y tenía dificultades para respirar. Compartió una imagen para advertir sobre los peligros de la cirugía estética.

Con el correr de los años, las cirugías estéticas se volvieron cada vez más comunes; en algunos casos, incluso, son cubiertas por algunos planes de prepagas. Este tipo de intervención no solo tiene como objetivo la belleza, pueden tener también un fin reconstructivo o regenerativo.

La cirugía estética puede ser una herramienta muy útil para mejorar la autoestima de una persona. No obstante, ese no fue el caso de Christina Burton. La mujer de 29 años que reside en Wythenshawe (Reino Unido) decidió aumentarse los labios por una cuestión estética. Una vez en su casa, se aplicó una crema anestésica que usaba antes del procedimiento y sufrió una fuerte reacción alérgica. Los labios se le hincharon tanto que no podía comer y hasta tenía dificultades para respirar.

Como tenía la garganta cerrada no podía ingerir ningún medicamento para aliviar los síntomas. “No pude tragar nada. Intenté tomar antihistamínicos y analgésicos para bajar la hinchazón y me puse hielo, pero todo se salió de control”, lamentó Burton en declaraciones a medios locales.

Después de ser atendida en su casa, la mujer fue llevada de urgencia al hospital, donde se le administró adrenalina, oxígeno y antiinflamatorios, antibióticos y esteroides para combatir la reacción alérgica.

“Los labios se hicieron cada vez más grandes y más dolorosos y no podía abrir la boca. Ni siquiera podía hablar, fue horrible. Pensé que iban a explotar. El dolor que tenía no se podía creer”, contó la mujer. Burton fue dada de alta después de un día entero en el hospital.

Después de la mala experiencia, decidió compartir una fotografía en las redes sociales para advertir sobre los posibles efectos adversos de una cirugía estética. Cuando difundió la imagen, la gente pensó que se trataba de un filtro de Snapchat. Sin embargo, cuando se dieron cuenta de que eran fotos reales, todos quedaron shockeados.

“Estoy compartiendo mi historia con la esperanza de que las personas estén conscientes de que las reacciones alérgicas pueden suceder a cualquiera. No volveré a ponerme rellenos. He tenido la tentación de hacerlo de nuevo, pero estoy asustada. Lo reservé y lo cancelé porque la idea de pasar por eso otra vez … simplemente no puedo, no vale la pena. Podría haberme matado, ¿quién se lo explicaría a mis hijos?”, manifestó.

El doctor en medicina y cirugía reconstructiva Jorge Guerrisi (MN: 40.168) explicó a ConBienestar que dentro de los primeros días después de una cirugía estética -e incluso durante los primeros tres meses- hay que cuidar toda la piel y, en particular, la zona de la cicatriz.

El aspecto emocional

La cirugía, más allá de los fines estéticos, también tiene beneficios a nivel psicológico. “Si la valoración que hacemos de nosotros es mala, tendremos una autoestima baja. Cuando eso sucede, solemos realizar determinadas acciones, como por ejemplo una cirugía estética, con la ilusión de que puedan contribuir a su incremento o bien suplir esa falta que nos causa angustia. Estas acciones muchas veces logran darnos seguridad y mejorar nuestro estado emocional”, analizó la licenciada en Psicología Eliana Alvarez (MN: 68 245) en diálogo con ConBienestar.

“Aunque las cirugías estéticas pueden ser muy positivas, hay que tener en cuenta que los conflictos más profundos de la persona no se resolverán solamente por cambiar la apariencia, por lo cual es importante conocer el objetivo por el que se quiere realizar este cambio, y eso solo se logra trabajándolo desde la palabra”, amplió la especialista.

Por otro lado, al salir de una cirugía estética comienza un proceso de asimilación de ese nuevo cuerpo que presenta el espejo. “Requiere un tiempo reconocerse en esa imagen distinta, por lo que es importante darnos espacio y expresar todas nuestras emociones”, indicó Alvarez.