El sobrino de Mauricio Sperdutti esperaba para jugar un partido de futbol y recibió un disparo en la cabeza, tiene 8 años.
Un niño de ocho años permanece en grave estado luego de recibir un balazo en la cabeza el sábado, cuando esperaba para jugar un partido de fútbol en un club de la zona sudoeste de la ciudad de Rosario, informó hoy una fuente judicial.
Benjamín fue trasladado de urgencia al Hospital de Niños Vìctor J. Vilela de Rosario, donde fue operado y quedó internado en la sala de terapia intensiva.
A las 16 de este sábado, Benjamín esperaba para jugar en una de las canchitas del Club Pablo VI, situado en la calle Garzón y bulevar Seguí, del barrio Goy, cuando recibió un disparo de arma de fuego, aparentemente de una bala perdida, explicó.
El niño, quien juega desde los 7 años en el Club 7 de Septiembre, de la zona noroeste de Rosario, es sobrino del ex delantero de Newell’s y Colón Mauricio Sperdutti, quien esperaba en el Hospital Vilela junto a los padres del pequeño.
“Fue terrible porque el chico estaba haciendo una entrada en calor, habia muchos pibes, era una actividad normal, un partido de fútbol entre clubes. Benjamín juega desde muy chico en el Club 7 de Septiembre. Los padres están destruidos”, declaró Sperdutti.
En tanto, en noviembre del año pasado Pablo Silva, un niño de 14 años, murió al recibir una bala perdida mientras miraba cómo jugaban sus hermanos en una canchita de Garibaldi y Puyrredón, en el barrio Alvear, también en la zona sudoeste de Rosario, producto de una pelea entre soldaditos de dos bandas de narcos.
