Eugenio Veppo empezó a declarar ante la jueza Yamile Bernan, pero la indagatoria fue suspendida a pedido de su abogado. El intercambio fue suficiente para que la magistrada enviara al periodista al penal de Ezeiza y cambiara la carátula de la causa a “homicidio simple con dolo eventual”.
Veppo, de 32 años, reconoció ante la Justicia que chocó “algo” con su auto, un Volkswagen Passat que abandonó en Ruggeri al 2800 antes de subirse a un taxi con sus dos acompañantes. El periodista viajaba con un amigo llamado Alberto y una mujer, Camila, a quien conocía hace poco tiempo.
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“No sé contra qué impacté. Era ‘algo'”, explicó Veppo en su breve declaración ante Bernan. El muchacho siguió manejando “por los nervios”, y por eso las cámaras de seguridad captaron su huida por la calle San Martín de Tours mano a Las Heras.
Veppo explicó que “estaba en shock” tras el accidente y por eso no se detuvo. No pudo precisar qué golpeó, pero fue “algo” lo suficientemente contundente como para dejarlo en ese estado de nerviosismo.
En ese momento la jueza Bernan insistió sobre el por qué del shock si no sabía contra qué había impactado. El periodista no contestó nada concreto y guardó silencio, por lo que su abogado, José Luis Ferrari, pidió suspender la declaración.
Ahí se decidió mandarlo a Ezeiza y calificar el delito como “homicidio simple con dolo eventual”, que acarrea una pena de entre 8 y 15 años de cárcel.
Ahora Bernan espera el resultado de estudios toxicológicos para determinar en qué estado se encontraba Veppo al margen del shock. Todavía falta para que se venza el plazo para dictar la prisión preventiva.
Veppo atropelló a dos inspectores de Tránsito del Gobierno porteño que intentaron detenerlo a las 3.40 del domingo para un control de alcoholemia en Figueroa Alcorta y Tagle.