El IML da su versión y dice que “hasta ahora no hay ningún elemento para afirmar que Orellano murió a golpes”

La directora del Instituto Médico Legal, Alicia Cadierno, confirmó este mediodía de manera categórica que hasta el momento “no hay ningún elemento” para afirmar que Carlos Orellano haya muerto a golpes como afirmó públicamente su padre, Edgardo Orellano. No obstante, la titular de la morgue apeló a la empatía para señalar: “Cualquier padre sentiría todo el derecho de reaccionar violentamente”. Mientras tanto, señaló que aguarda el resultado de estudios complementarios para confirmar o descartar lesiones vinculadas al fallecimiento del joven, cuyo cuerpo apareció flotando en el río tras asistir al boliche Ming River de La Fluvial la semana pasada. Por otra parte, desmintió que hayan habido malos tratos para con la perito de parte Virginia Creimer.

“No tenemos hasta el momento ningún elemento para afirmar semejante cosa. Y si es que lo son, son lesiones que no pueden ser vinculadas de forma directa con la muerte. Estoy absolutamente segura de afirmarlo, no hay lesiones oseas subyacentes”, sentenció Cadierno a la hora de contraponer la versión difundida por el padre del joven tras la realización de la autopsia en el Instituto Médico Legal (IML).
Sin embargo, la titular del IML manifestó un gesto de empatía hacia Orellano al señalar que “cualquier padre que recibiera un informe respecto a que un hijo ha sido lesionado se sentiría con todo el derecho de reaccionar violentamente”.

Respecto a los estudios realizados en el cadáver de Bocacha, Cadierno precisó: “Puede decirse que como lesiones generales en la superficie corporal y en los tejidos superficiales han habido algunos focos que llaman a la necesidad de analizar exámenes complementarios para descartar o confirmar golpes”.

No obstante, afirmó: “Si se han descartado otras lesiones que puedan estar relacionadas de forma directa como heridas de arma de fuego o de arma blanca, compresiones a nivel cervical”.

A la hora de hablar sobre la hipótesis de sumersión, indicó que “hay otros elementos a tener en cuenta en el caso de asfixia por sumersión. Hay que tener en cuenta que el cadáver se encuentra en estado de putrefacción, de modo que efectuar estudios anátomopatológicos, sumado al estudio de las diatomeas del placton, por eso se ha reservado material óseo para permitirlo”, al tiempo que precisó: “También es muy importante precisar los estudios toxicológicos para saber cuál era el estado de conciencia del joven al momento de caer al agua”.

Otra de las objeciones vertidas en las últimas horas giraron en torno a la participación de la perito de parte Virginia Creimer, puesto que el padre del joven adujo “malos tratos” y acusó en ese sentido a la Fiscalía de “embarrar la cancha para entorpecer la investigación”.

Conforme a esa versión, Cadierno sostuvo: “Hubo más de 30 personas trabajando de manera concomitante desde el inicio de la autopsia y hasta el final que firmamos el acta todas las partes, y todos pueden confirmar el trato que se le ha dado a la doctora, desde aportarle vestimenta hasta el trato cordial, tanto a ella como a las personas que la acompañaban”.

Sin embargo, reconoció que “hubo una objeción por el uso de un celular que hizo la doctora hacia un perito, pero entiendo que las partes han quedado conformes con la autopsia”.