En el marco de la pandemia de Covid-19 que transita uno de los países más afectados, Brasil registró 2.700 muertes en 24 horas, la mayor cifra en más de un mes, en medio de un alarmante repunte en la ocupación de las salas de terapia intensiva.
Autoridades y especialistas han advertido que la marcha relativamente lenta de la vacunación, la reapertura prematura de la economía y la circulación de la variante india auguran una nueva embestida de la pandemia en el segundo país con la mayor cantidad de decesos registrados después de los Estados Unidos.
Brasil, gobernada por el presidente Jair Bolsonaro, sumó ayer otros 52.448 casos de coronavirus en las 24 horas previas, según informaron las autoridades sanitarias.
Por otra parte, el total de personas fallecidas llegó a 477.307 tras sumarse otras 2.693, la cifra más grande desde el 5 de mayo, con un promedio móvil de 1.714 por día en la última.
El Instituto de investigación Fiocruz, del Gobierno federal, reportó además que por tercera semana consecutiva subió la ocupación de las UTI para pacientes infectados con la Covid-19. En 11 de las 27 capitales, la tasa de ocupación de ese tipo de salas superó el 90%.
En los dramáticos meses de marzo y abril, cuando se llegó a un pico de más de 4.000 muertos en un solo día, casi todos los gobernadores reimpusieron el cierre de servicios no esenciales y toques de queda nocturnos.
Sin embargo, ni bien empezaron a caer los números, las medidas se relajaron, según los expertos, de manera prematura, mientras el país de 212 millones habitantes se acerca al medio millón de muertos y presenta una de las mayores tasas de mortalidad por cada 100.000 habitantes del mundo (más de 220).
Unos 1,3 millones de brasileños recibieron ayer la primera dosis de una vacuna contra la Covid 19, el número más alto desde que comenzó la campaña de inmunización, el 17 de enero pasado, informaron autoridades de Salud.
Desde entonces fueron colocadas 74,2 millones de las vacunas AstraZeneca, británica, Coronavac, china, y Pfizer. Hasta el momento, 23,3 millones de personas se aplicaron las dos dosis, lo que representa el 24 % de la población brasileña.
