Los niños que siguen dietas veganas son más proclives a tener estatura más baja y huesos más débiles

Se trata de una investigación de la University College de Londres que involucró a 187 chicos sanos de cinco a diez años, de los cuales 52 eran veganos. Este grupo mostró 3 veces más probabilidades de tener deficiencia de vitamina B-12 que los omnívoros.


Las dietas veganas podrían impactar negativamente en la salud de los más niños, alertó un estudio británico. Según investigadores de la University College de Londres, aquellos chicos de entre cinco a diez años que participaron en la investigación y siguieron esta tendencia alimentaria mostraron huesos más débiles y presentaban una altura menor a los omnívoros.

Los científicos hallaron que los niños de cinco a diez años que consumen dietas a base de plantas son en promedio tres centímetros más bajos que los que comen carne.

Sus huesos también eran más pequeños y menos fuertes, lo que ponía a los niños en riesgo de sufrir fracturas u osteoporosis en el futuro.

El estudio, publicado por Cambridge y realizado por el Instituto de Salud Infantil Great Ormond Street de la University College de Londres alertó que los padres deben ser conscientes de los riesgos de las dietas veganas.

Los autores dijeron que los niños veganos deberían recibir suplementos de vitamina B12 y vitamina D para reducir las posibles consecuencias a largo plazo para la salud de ser criados solo con plantas.

Según un estudio realizado por la Unión Vegana Argentina (UVA) en 2020, el 12% de la población de Argentina es vegana o vegetariana, mientras que otro 12% se define como flexitariano. Estas cifras marcan un aumento del 3% con respecto al pasado 2019.

Los nuevos datos publicados hoy por la Plant Based Foods Association y The Good Food Insititute revelan que las ventas de carne, productos lácteos y huevos de origen vegetal en EE.UU. han superado a las de productos de origen animal por tercer año consecutivo.

Más del 40% de consumo de leche no láctea y uno de cada seis hogares estadounidenses ahora consume carne de origen vegetal. El queso de origen vegetal creció un 42%, casi el doble que el queso de origen lácteo, mientras que los huevos de origen vegetal crecieron un 168%, casi 10 veces más que los huevos de ave.

Los veganos eliminan todos los productos animales, incluidos los lácteos, los huevos e incluso la miel. Pero hay poca evidencia sobre el daño potencial que esto causa a la salud de los niños.

El autor principal, el profesor Jonathan Wells, de la UCL, precisó: “Sabemos que las personas se sienten cada vez más atraídas por las dietas basadas en plantas por varias razones, incluida la promoción del bienestar animal y la reducción de nuestro impacto en el clima”.

“De hecho, ahora se reconoce que un cambio global hacia dietas basadas en plantas es crucial para prevenir el colapso climático, y apoyamos firmemente este esfuerzo. También sabemos que hasta ahora la investigación sobre el impacto de estas dietas en la salud de los niños se ha limitado en gran medida a evaluaciones de la altura y el peso y se ha realizado solo en niños vegetarianos”, añadió.

De acuerdo al experto, “este estudio proporciona una visión sustancial de los resultados de salud en los niños que siguen dietas vegetarianas y veganas”.

La flamante investigación examinó a 187 niños sanos de entre cinco y diez años en Polonia. De estos, 63 niños eran vegetarianos, 52 veganos y 72 omnívoros.

Los niños con dietas veganas eran en promedio tres centímetros más bajos. También tenían un contenido de minerales óseos entre un cuatro y un seis por ciento menor y tenían más de tres veces más probabilidades de tener deficiencia de vitamina B-12 que los omnívoros.

La coautora, la profesora Mary Fewtrell, agregó: “Se recomienda maximizar la salud ósea en los niños con el objetivo de reducir el riesgo de fracturas y osteoporosis en el futuro”.

“Descubrimos que los niños veganos tenían menor masa ósea incluso después de tener en cuenta su menor tamaño corporal y óseo. Esto significa que pueden entrar en la adolescencia, una fase en la que las necesidades de nutrientes específicos de los huesos son mayores, con un déficit óseo ya establecido”, explicó.

“Si tales déficits son causados por una dieta que persiste hasta la adolescencia, esto podría aumentar el riesgo de resultados óseos adversos más adelante en la vida”, agregó.

Sin embargo, en el lado positivo, los niños veganos tenían niveles un 25 por ciento más bajos de colesterol LDL “malo” y niveles más bajos de grasa corporal. Otra de las coautoras, la doctora Małgorzata Desmond, opinó: “Descubrimos que los veganos tenían una mayor ingesta de nutrientes que indicaba un tipo de dieta ‘sin procesar’ a base de plantas, que a su vez está relacionada con una menor cantidad de grasa corporal y un mejor perfil de riesgo cardiovascular”.

“Por otro lado, su menor ingesta de proteínas, calcio y vitaminas B12 y D puede explicar sus concentraciones de vitaminas séricas y minerales óseos menos favorables. Al principio nos sorprendió el perfil de salud cardiovascular deficiente de los niños vegetarianos, pero sus datos dietéticos mostraron que estaban comiendo un tipo de dieta basada en plantas relativamente procesadas, con niveles menos saludables de fibra y azúcares en comparación con los veganos”, advirtió.

Según Desmond, “estamos aprendiendo que el solo hecho de comer dietas basadas en plantas no es garantía de salud, aún necesitamos seleccionar alimentos saludables”.

Los investigadores esperan que sus hallazgos resalten la necesidad de más consejos para el público sobre cómo pueden comer de manera saludable con dietas basadas en plantas.

“Esto es particularmente relevante para los niños, ya que pueden tener mayores necesidades de nutrientes mientras crecen”, agregó el profesor Wells y concluyó: “Nuestro objetivo es realizar más investigaciones para ayudar a maximizar los beneficios para la salud de las dietas a base de plantas en los niños”.

 

Fuente: Infobae