Pablo Cococcioni no descartó la utilización de pistolas taser

El ministro de Seguridad de la provincia de Santa Fe aseguró que el único “prurito” que tienen es pragmático y económico, no ideológico.

El ministro de Seguridad de la provincia, Pablo Cococcioni, se refirió en Radio EME al uso de las armas de electrochoque y no descartó su utilización. Sin embargo, aclaró que existen otras prioridades más inmediatas como patrulleros, chalecos y municiones para la fuerza.

“Jurídicamente no tenemos inconvenientes para aplicarlas. La pistola de electrochoque tiene menor letalidad que un arma 9mm. Sin embargo, vamos a evaluar en función del costo y la viabilidad para abastecer. Tenemos 23.000 policías y estas armas son costosas”, comenzó remarcando el funcionario.

Por otro lado, Cococcioni dijo que “El Gobierno Nacional las utiliza de manera selectiva, en ciertos ámbitos, no se les da a todos los efectivos policiales. Nosotros no tenemos ningún prurito ideológico, el único que tenemos es pragmático y económico”.

¿Qué es una pistola taser?

La pistola Taser fue diseñada por John H. Cover, piloto de bombardero durante la Segunda Guerra Mundial, y la denominó así por el acrónimo de Tom Swift, su personaje favorito de ficción.

La Taser es un arma de electrochoque “no letal” que, al tener contacto con un sujeto, incapacita de forma temporal a las personas. Esto es posible mediante el disparo de dardos electrificados que paralizan los mecanismo musculares del cuerpo.

Luego del uso de cada Taser, la memoria interna del dispositivo empleado será preservada para los controles que sean necesarios realizar a futuro. Este tipo de armas es utilizado en países como Alemania, Arabia Saudita, Canadá, Noruega, Polonia, Reino Unido, Turquía, Costa Rica, República Dominicana, Guatemala, Honduras, Panamá, Ecuador, Chile, Colombia, Brasil, Bolivia, entre otros.

En palabras del fabricante, los dardos de la pistola Taser tienen la capacidad de perforar la piel del objetivo. Al ser impactado, los choques eléctricos que recibirá el cuerpo contraen -de forma violenta- los músculos y son capaces de generar un fuerte dolor en la persona afectada.