Tragedia en Japón: casi medio centenar de muertos tras el terremoto de Año Nuevo

Tuvo una intensidad de 7,6 y el epicentro se registró en la zona central. Sigue el alerta de tsunami y hay miles de evacuados.

El fuerte terremoto que sacudió el centro de Japón el día de Año Nuevo causó la muerte de al menos 48 personas, mientras la policía y las autoridades locales informaban a primera hora del martes de casos de cadáveres siendo sacados de entre los escombros de edificios derrumbados.

Un fuerte terremotosacudió el lunes el centro de Japón, destruyendo edificios, dejando sin electricidad a decenas de miles de hogares y obligando a los residentes de algunas zonas costeras a huir a terrenos más elevados.

 

 

El movimiento, con una magnitud de 7,6, provocó olas de alrededor de un metro en algunas zonas de la costa del mar de Japón y se espera una ola mayor, informó la cadena pública NHK.

La Agencia Meteorológica de Japón emitió alertas de tsunami para las prefecturas costeras de Ishikawa, Niigata y Toyama, marcando las primeras alertas importantes desde el terremoto y tsunami de marzo de 2011 que azotó el noreste de Japón. Más tarde las rebajó y finalmente las redujo a una advertencia.

Fue el terremoto más fuerte en la región en más de cuatro décadas, según el Servicio Geológico de Estados Unidos.

El portavoz del gobierno, Yoshimasa Hayashi, informó a periodistas la destrucción de casas, el inicio de incendios y que se había enviado personal del Ejército para ayudar en las operaciones de rescate.

Imágenes difundidas por medios locales mostraban un edificio derrumbándose en medio de una columna de polvo en la ciudad costera de Suzu y una enorme grieta en una carretera de Wajima, donde los padres, presos del pánico, agarraban a sus hijos. El terremoto también sacudió edificios de la capital, Tokio, a unos 500 kilómetros de Wajima, en la costa opuesta.

Un testigo publicó en la plataforma de redes sociales X imágenes del Gran Santuario de Keta, cerca de la costa en Hakui, balanceándose por el terremoto mientras una multitud de visitantes
lo observaba.

Millones de japoneses visitan tradicionalmente santuarios y templos el 1 de enero para marcar el comienzo del nuevo año.

En la cercana Kanazawa, un popular destino turístico, imágenes mostraban los restos de una puerta de piedra destrozada, esparcidos a la entrada de otro santuario, ante la mirada ansiosa de los fieles. El temblor también se sintió en las montañas de la vecina prefectura de Nagano.

 

 

MILES DE EVACUADOS

En declaraciones a la prensa poco después del movimiento, el primer ministro, Fumio Kishida, también advirtió a los residentes que se prepararan para más desastres.

“Los residentes deben permanecer alerta ante la posibilidad de nuevos temblores e insto a los habitantes de las zonas donde se esperan tsunamis a que evacuen cuanto antes”, dijo Kishida.

El gobierno informó que hasta el lunes por la noche había ordenado la evacuación de más de 97.000 personas en nueve prefecturas de la costa occidental de la isla principal de Honshu.

La gente iba a pasar la noche en pabellones deportivos y gimnasios escolares, utilizados habitualmente como centros de evacuación en casos de emergencia.

El terremoto y el tsunami de 2011 mataron a casi 20.000 personas y devastaron ciudades y centrales nucleares en Fukushima.

Otro movimiento, conocido como el Gran Terremoto de Hanshin, sacudió el oeste de Japón en 1995, matando a más de 6.000 personas, principalmente en la ciudad de Kobe.

Ayako Daikai, residente de Kanazawa, dijo que había evacuado a una escuela primaria cercana con su marido y sus dos hijos poco después del terremoto. Las aulas, las escaleras, los pasillos y el gimnasio estaban abarrotados de evacuados.

“También viví el Gran Terremoto de Hanshin, así que pensé que lo más seguro sería evacuar”, dijo a Reuters cuando se puso en contacto con ella por teléfono. “Aún no hemos decidido cuándo
volver a casa”.

La Autoridad de Regulación Nuclear de Japón afirmó que no se han confirmado irregularidades en las centrales nucleares situadas a lo largo del mar de Japón, incluidos los cinco reactores activos de las centrales de Kansai Electric Power Ohi y Takahama, en la prefectura de Fukui.

La planta Shika de Hokuriku en Ishikawa, la central nuclear más cercana al epicentro del terremoto, ya había detenido sus dos reactores antes del movimiento para realizar inspecciones periódicas y no vio ningún impacto del terremoto, dijo la agencia.