Un joven cadete sufrió un impacto de bala en la cara cuando fue abordado por dos sujetos en una motocicleta en las inmediaciones de 1º de Mayo y J.P. López.
Los cadetes volvieron a estar en el foco de la violencia y la inseguridad. El pasado sábado, en horas de la madrugada, un repartidor de comida fue baleado en la cara durante un intento de robo en las inmediaciones de 1º de Mayo y J.P. López de la ciudad de Santa Fe.
Mientras regresaba a su vivienda, Santiago fue abordado por dos delincuentes que se trasladaban en motocicleta y le dispararon en el rostro. Inmediatamente, los agresores se dieron a la fuga y la joven víctima fue auxiliado hasta por vecinos de la zona hasta la llegada de su familia. Luego fue trasladado hacia el Hospital José María Cullen.
Tras recibir atención médica en el nosocomio, el muchacho fue dado de alta ya que su cuadro es estable. A pesar del impacto de bala, el uso del casco logró evitar una mayor herida. Posteriormente, ya se encuentra en su casa donde permanece bajo cuidados. «Está fuera de peligro. Aún resta saber si tendrá alguna secuela y posiblemente si tendrá que ser intervenido», mencionó Horacio, padre del joven baleado, en el móvil de Radio EME.
Además, relató lo ocurrido: «Me llamaron mientras dormíamos que le habían pegado un tiro a mi hijo. Tenía la sangre de él en mis manos. Esa imagen no me puedo sacar de la cabeza».
En tanto, mencionó: «Ayer llegó a casa y festejamos. Estamos conmocionados. No puede ser que no se pueda trabajar».
Por último, exclamó: «Espero que la Justicia haga algo con estas basuras. No podemos vivir en una Santa Fe tan violenta».
