Después de un escándalo el Concejo aprobó la emergencia social

“Acá no hay 2001 ni helicóptero, hay un gobierno que gestiona y da respuestas”. Esa frase fue el detonante de momentos de gritos, insultos y corridas en el Palacio Vasallo. Sí, la palabra de Roy López Molina encendió la mecha que generó cruces verbales y hasta empujones en la barra, donde estaban ubicados militantes de organizaciones sociales y seguidores de Cambiemos en la jornada donde se debatió la declaración de la emergencia social, que finalmente se aprobó por unanimidad.

El clima en el recinto cambió cuando el edil macrista tomó la palabra. Fueron 10 minutos de incertidumbre. De acusaciones. De forcejeos en el sector del público.

Ante esta situación, el presidente del cuerpo legislativo, el también macrista Alejandro Rosselló, tomó el micrófono y pidió desalojar el recinto.

Todo comenzó con el pedido del peronismo de impulsar la declaración de la emergencia social, instancia que contaba en la previa con el aval de todos los sectores menos de los ediles de Cambiemos.

Sin embargo, a último momento los ediles del PRO, que intentaban declarar la emergencia en seguridad, finalmente aceptaron la derrota y votaron la emergencia social.

Fue por unanimidad, tuvo 27 votos a favor, ninguno en contra y una ausencia en la definición de la jornada.