Se estrenó “Apache”, la serie sobre la vida de Tévez

La miniserie de Netflix sobre la vida de Carlos Tévez está disponible desde hoy.


“Nunca tomé dimensión de si corría peligro o no. Creo que la muerte, con el problema que tuve de la quemadura… nunca tomé conciencia de que la pasé muy cerca”. Carlitos Tevez introduce, en primera persona, la serie Apache, un retrato entre épico y dramático sobre su vida, desde sus orígenes humildes al estrellato mundial.

Esta historia en ocho episodios que estrena hoy Netflix muestra al pequeño Carlos en el corazón del Fuerte Apache, rodeado de pandillas, drogas, ajustes de cuentas y marginalidad. Pero también rodeado de amor, y con un mensaje de esperanza.

Protagonizada por Balthazar Murillo, Alberto Ajaka, Vanesa González, Sofía Gala Castiglione, Patricio Contreras y Diego Pérez, entre otros, Apache cuenta con la dirección de Israel Adrián Caetano. El propio Carlos Tévez es productor y trabajó en el desarrollo de la historia, pero no quiso ver nada antes que el resto.

Se lo ofrecieron, pero él prefirió verla al mismo tiempo que la gente y que su familia, y compartir la experiencia y su propia vida junto a sus hijas e hijo.

Mira el trailer de la serie sobre la vida de Carlos Tévez:

Rodada durante cuatro meses y medio en el mismísimo Fuerte Apache en el que Carlitos se crió, con crudeza pero sin golpes bajos, la trama aborda la biografía por momentos incómoda del “jugador del pueblo”. Caetano destacó la valentía de abrir su vida, mostrando sinsabores y contradicciones. “Fue admirable. Tevez tuvo una mirada amplia. Cuando decía ‘quiero contar todo’, hablaba de un todo muy generoso”.

Alberto Ajaka, Vanesa González y Balthazar Murillo dialogaron con VOS acerca del desafío de contar la vida de este ídolo gigante… aunque los dos varones sean de Independiente y Vanesa se llame “gallina”.

“Viví una gran experiencia actoral. Conocí a grandes actores, ahora amigos, y aprendí muchísimo. Pero también fue increíble conocer el Fuerte Apache, la historia de Carlos, sus amigos, su familia. Nunca imaginé que podía pasar”, dice Balthazar, de 14 años.

Él dice que estuvo en contacto con Carlitos para trabajar el personaje, aunque no durante las grabaciones sino antes. Lo más loco que le pasó era verse otro.

“Lo más difícil fue la caracterización del personaje de Carlitos. La dentadura postiza, la prótesis, verme diferente y no verme a mí. Pero me ayudó mirarme al espejo y verlo a él”, agrega.

Historia y geografía

Para Alberto Ajaka, que interpreta a Segundo Raimundo Tevez –padre adoptivo de Carlitos–, hay algo genuino y honrado en plantear la historia en el mismo Fuerte Apache. “Ahí transcurrió su vida, su recorrido… pero narrativamente se podía poner el ojo en otro lado y se hizo en el territorio, en la geografía, y ése es uno de los aciertos de la serie. La geografía acompaña dramáticamente a la épica del personaje”.

El actor, cuyo papel es esencial en la vida posterior de Tevez, destaca que todos los personajes del entorno van adquiriendo su tinte dramático porque están en ese contexto que funciona al mismo tiempo “como facilitador y antagonista, como inhibidor y trampolín” en la historia de Carlos.

El hecho de que el ídolo no haya tomado el camino fácil que se le ofrecía en la puerta de su casa tuvo mucho que ver con el entorno de amor familiar.

Vanesa González, que interpreta a la tía de Carlos (que fue su madre adoptiva junto a Segundo), dice que la serie “pone el amor y los valores como herramienta de salida, de progreso”. A su alrededor estaban ellos, la escuela, el club, para “salvarlo” de ese contexto marginal y a veces violento.

“La familia cobra ese lugar que por ahí el Estado no contiene –agrega Ajaka–. A veces hay que encargarse de suplir también eso. El Fuerte Apache no tiene la precariedad de una villa, pero a veces nos olvidamos y perdemos la perspectiva de lo difícil que puede ser para quienes viven allí. Para ir a una guardia de un hospital público en el conurbano necesitás todo el día. Todo cuesta no el doble, tres o cuatro veces más”.

Para el actor, es un acierto de la serie que ese mundo esté presente en la historia, que va recorriendo la vida épica de Tevez con el final feliz conocido.

Guerrero

Apache no está centrada en lo futbolístico, como Monzón no lo hace en lo boxístico. No se trata de series para fanáticos del deporte, y mucho menos para evitarla por la rivalidad de Boca con otros clubes.

“Eso tienen estas biopics –explica Vanesa–, que abordan historias reales, la vida de alguien que vivió así, y que no puede disparar para cualquier lado. Eso tienen de atrapantes las biopics, y por eso funcionan tan bien

Según Alberto Ajaka, la vida de Tevez también retrata esa condición de un guerrero, querible, que se sobrepone a las dificultades. “A veces un campo de fútbol es un campo de batalla”, dice, y agrega que “la pequeña vida de cualquier persona está cargada de su propia épica, y uno se ve reconocido también, puede empatizar. En lo cotidiano, todos somos guerreras y guerreros de la que nos toca. Esta es la condición de la serie biográfica, sumado a que al personaje no le faltan condimentos para que eso ocurra, para ser querido, adorado, y muy divertido también”.

Acerca de lo más difícil de rodar Apache, los tres tienen algún punto coincidente en el epicentro de Fuerte Apache. “Fue al mismo tiempo lo más complicado y lo más satisfactorio del proceso –acota Vanesa–. Tenía esa curiosidad, esa adrenalina, ese miedo que quería romper que terminó por ser una de las cosas más bellas, desde todo punto de vista: convivir esos cuatro meses y medio en el barrio, en ese escenario, que propone una herramienta muy fuerte a la hora de poder trabajar. Y por supuesto el desafío de contar la historia”.

Alberto coincide con Vanesa y agrega el trabajo y la exigencia que le propuso Caetano. “Por un lado, teníamos que trabajar la necesidad del guion de narrar la palabra paternal, didáctica; por el lado, la demanda de la austeridad expresiva, del tiempo, la utilización de los silencios y demás. En términos de composición de personajes, me pareció algo muy complejo y entretenido para trabajar”.