El mandatario además expresó hoy que el gobierno aspira a que se haga un «amplio debate» sobre cómo se accede a que intervenga en un caso la Corte Suprema.
El presidente Alberto Fernández sostuvo este lunes que evaluó mal la reacción social que generaría la intervención de la cerealera Vicentin y aseguró que no es “un loco suelto” que anda “con una chequera de expropiaciones”.
“Cuando miro para atrás y me pregunto qué hice mal en Vicentin, veo que me equivoqué porque pensé que estaba más asumida la situación de crisis. Pensé que iban a salir a festejar. No pasó, empezaron a acusarme de cosas horribles”, explicó el mandatario.
Fernández resaltó que Argentina «está preparada para llevar adelante esta etapa de prueba de la vacuna» para prevenir el coronavirus y expresó su anhelo de que, cuando ya esté aprobada, la vacuna «llegue al país» en simultáneo con su llegada a los países centrales.
El mandatario además expresó hoy que el gobierno aspira a que se haga un «amplio debate» sobre cómo se accede a que intervenga en un caso la Corte Suprema de la Nación, que actualmente es sólo a través de un recurso extraordinario, en el marco de la reforma judicial que impulsa su gestión.
«Hay que revisar cuándo la Corte debe intervenir, no sólo cómo funciona y la cantidad de miembros, sino también cómo se accede a la Corte, que se llega sólo por un recurso extraordinario reglamentado por una ley de hace muchísimos años», reflexionó Fernández.





