El hermano del arquitecto asesinado le dijo a los que investigan: “Pedimos un poco de respeto, no somos tan idiotas”

A mas de 2 semanas del asesinato de Joaquín, el arquitecto asesinado en la puerta de su casa en zona norte para intentar robarle el auto, se realizó una nueva marcha para pedir justicia.


Familiares, amigos, vecinos y familiares de víctimas de la inseguridad realizaron un abrazo simbólico a media cuadra de donde fue asesinado el arquitecto rosarino por dos personas que se desplazaban en moto y lo mataron para robarle el auto.

Los familiares pintaron una estrella roja con el nombre y la fecha del crimen de Joaquín a manos de dos delincuentes.

“La sensación es que la justicia no está, no puede ser que a los pocos días de matar a Joaquín hayan matado a otro chico (Isaac Moreno). La sensación es que los delincuentes tienen vía libre para hacer lo que quieran y nosotros tenemos que estar encerrados en nuestra causa”, sentenció Leandro, el hermano de Joaquín, el arquitecto asesinado en zona norte hace quince días.

Respecto a las novedades que tuvo en torno a la causa, sentenció que “ninguna”, y que al principio parecía que “tenían todo para encontrarlo, y a los pocos días no tenemos nada. Está el arma pero no le pueden encontrar las huellas”.

Y enseguida agregó: “En fiscalía nos dijeron que estos dos individuos usaron guantes, es una tomada de pelo. ¡Que ladrón sale en moto a robar con guantes de látex! Pedimos un poco de respeto, no somos tan idiotas”.

Respecto a si había tenido contactos en los últimos días con las autoridades, Leandro comentó que “no, no tuve más contactos con ninguno. Sé que tuvieron contacto con mi cuñada pero nada cambió. Siguen robando, matando y lastimando a la gente. Incluso parece más fuerte la ola de violencia, no sé hasta dónde vamos a llegar”.

Casi al borde de quebrarse, también recalcó que “nunca en mi vida pensé que iba a estar haciendo esto, en la esquina de la casa donde viví mi infancia, la casa que mi hermano eligió para vivir con su esposa y su hija, tener que pintar una estrella roja con la fecha de la muerte y el nombre de él. No tengo palabras para describir lo que está pasando la familia de mi cuñada y la mía”.

Pese a esta sensación de incertidumbre, no se rinde y afirma que va a seguir pidiendo justicia y que no va a parar hasta que aparezcan los dos delincuentes que mataron a quemarropas a su hermano. “Quiero que aparezcan y que cumplan la condena que les corresponda”.