La decisión tomada por la administración provincial se conoció tras la no adhesión del sindicato de los choferes del transporte (UTA) de no plegarse a la medida de fuerza convocada por las centrales sindicales CGT y CTA.
Fuentes gubernamentales confirmaron que los docentes que no se adhieran al paro deberán dejar constancia en las declaraciones juradas de que se presentaron a cumplir tareas en los respectivos establecimientos educacionales.
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Quienes no lo hagan, se verán ante la decisión del ministerio de educación de practicar las detracciones salariales correspondientes al día no trabajado y también al descuento del adicional pagado bajo el concepto “Asistencia Perfecta”.
Además, fuentes del gobierno de Santa Fe confirmaron que también se realizará el descuento al resto de los empleados públicos que realicen el paro.
“Igual que ocurrió con el paro del 8 de mayo de 2024”, dijo un importante vocero del gobierno a este cronista.
Efectivamente, en aquel paro nacional la administración de Maximiliano Pillarlo descontó a todos los empleados públicos y docentes que se sumaron al reclamo nacional contra el gobierno del presidente Miel.
La sustancial diferencia es que se admite que a los empleados públicos el gobierno devolvió el día descontado en diciembre pasado, bajo el ítems salarial “bonificación de fin de año”.
