Organizaciones sociales que trabajan con los sectores más vulnerables de la sociedad, particularmente con jóvenes insertos en problemas de consumo de drogas, se manifestaron frente a la Legislatura Provincial para pedir una mejor partida presupuestaria.
Gisella Scotta, de la agrupación «Ni un pibe menos por la droga» aseguró que desde noviembre 2017 se viene dando el recorte en la Sedronar. «Es difícil trabajar con un presupuesto congelado con la inflación que tiene Argentina», agregó.
Las actividades que se realizan son libres y gratuitas para pensar en un futuro mejor para los chicos vulnerables. El presupuesto se utiliza para pagar el alquiler de la sede, rendir honorarios al equipo de profesionales y comprar elementos para los talleres culturales y deportivos. Además existen «gastos cotidianos» como los que se necesitan para desayunos y meriendas.
Por su parte, Nahuel Zetner de «Casa Pueblo» que funciona en Villa del Parque, sumó que el presupuesto «no nos alcanza. Es imposible funcionar con la misma caja que 2017 con una situación compleja».
Móvil Mauro González:
