A pesar del crecimiento de la disciplina en los últimos años, el fútbol femenino sigue ocupando un lugar secundario en las prioridades de los dirigentes de la AFA. Ante esta situación, tres jugadoras de la Selección femenina renunciaron al equipo y dispararon directamente contra la casa madre del fútbol argentino.
Se trata de Lorena Benítez, Julieta Cruz y Laurina Oliveros, quienes decidieron denunciar en sus redes sociales la precaria situación que vive el plantel femenino en el predio de la AFA, donde por ejemplo, no reciben ni desayuno ni almuerzo.
La primera en romper el silencio fue Benítez, mediocampista titular durante la última Copa del Mundo: “¿La respuesta de siempre? ‘NO HAY PLATA’”, escribió en su cuenta de Instagram luego de explicar que les ofrecieron un sandwich de jamón y queso y una banana como almuerzo.
“De mi parte, decido no seguir dando la cara, poniendo el pecho por personas que solo aparecen para la foto”, afirmó continuando con su denuncia y advirtiendo que desde AFA les comunicaron que tampoco van a pagarles los viáticos correspondientes a la próxima fecha FIFA.
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