Colón le puso punto final a una de las peores campañas de su historia. En la última fecha de la Primera Nacional 2025, el conjunto rojinegro derrotó 1-0 a Defensores Unidos de Zárate en el Brigadier López, con un tanto de Christian Bernardi, uno de los pocos que mantuvo el orgullo en alto hasta el final.
El encuentro tenía poco en juego: Colón ya había asegurado su permanencia y el CADU llegaba descendido. Sin embargo, para los hinchas sabaleros el partido significaba mucho más que tres puntos. Era una despedida, una oportunidad de mostrar bronca, pero también de sostener la ilusión de que algo mejor puede venir.
Durante la primera parte, el conjunto de Ezequiel Medrán intentó imponer condiciones, aunque sin demasiada claridad. Bernardi avisó con un tiro libre que dio en el ángulo y luego fue Yunis quien probó de media distancia, obligando al arquero Aquino a lucirse. El guardameta visitante fue figura y sostuvo a su equipo en más de una ocasión.
En el complemento, el local salió decidido a buscar el triunfo. A los 9 minutos, Lago desbordó por la izquierda y asistió a Bernardi, que definió con clase para el 1-0 definitivo. Fue el premio a la insistencia de un equipo que, pese a un año cargado de frustraciones, logró despedirse con una sonrisa.
El cierre del partido tuvo un sabor agridulce. Algunos jugadores fueron despedidos entre aplausos, mientras desde las tribunas se repitió el mensaje claro de la hinchada: “que se vayan todos”. Aun así, el debut de varios juveniles y el compromiso de los que quedaron en pie dejaron una leve sensación de esperanza de cara a lo que viene.
Colón cierra su 2025 lejos de los objetivos que se propuso al inicio, pero con la necesidad impostergable de reconstruirse desde las bases. El triunfo ante el CADU no borra los errores, pero al menos sirvió para que el Brigadier López volviera a celebrar, aunque sea por un rato, el orgullo de ser Sabalero.
