Secuestraron a una joven de 15 años y la violaron al frente de su casa

El padre de la chica fue a acompañar a su esposa a la parada del colectivo. Al volver, notó que su hija había sido raptada.


Un hombre denunció que a su hija adolescente de 15 años la raptaron de su casa mientras estaba durmiendo y la violaron en un descampado frente a la vivienda, en barrio Nuevo Argüello, de la ciudad de Córdoba.

El padre de la chica, Jorge, contó que el sábado se levantó temprano para acompañar a su esposa a la parada del colectivo, por la peligrosidad en el sector, y que, cuando volvió, su hija de 15 años había sido raptada.

“Al regresar me encuentro con que no estaba. Ella estaba durmiendo cuando esta persona ingresa. Uno se roba las cosas y el otro se lleva a mi hija”, contó.

El hombre relató que dos hombres, que habían merodeado el frente de su casa, ingresaron finalmente a su domicilio mientras él no estaba. Ese medio indicó que el hecho sucedió en barrio Nuevo Argüello.

La joven “estaba durmiendo literalmente” cuando uno de los sospechosos ingresó a la habitación de la vivienda. “Uno de ellos se roba las cosas, mientras que el otro se lleva a mi hija”, describió.

“El que estaba despertando a mi hija nombra al otro sujeto –que ya está detenido–. Intenta abusarla sexualmente adelante de sus hermanos, en su propia cama, al destaparla”, indicó y agregó que otro de sus hijos alcanzó a ver la contextura física y el rostro de uno de ellos.

El hombre dijo que su hija fue violada en cercanías de la casa. “En eso que la buscamos, vemos unos sujetos que habían estado antes en la puerta de mi casa, un hombre venía del descampado. Y aparece mi hija desde la misma dirección”, añadió.

El hombre, que destacó el accionar policial al llegar prontamente tras su denuncia, contó que la chica está recibiendo atención médica y psicológica. “Psicológicamente está mal. Le cagaron la vida. Tiene 15 años”, indicó.

“De momentos, está bien, sonriente, pero después le cae la ficha y está mal”, afirmó. La joven recibió el apoyo de profesores, vecinos y compañeros de curso, que la visitaron para intentar levantarle el ánimo.