Jardines maternales y vacaciones: qué tener en cuenta a la hora de buscar guardería en verano

Ya se acercan las vacaciones, falta muy poco para que terminen las clases. Y comienza el problema de la logística para muchas familias y la búsqueda de guarderías para los más chiquitos, pues la rutina para los padres sigue.

Dejar a los chicos al cuidado de un familiar es la opción más cómoda. Pues los niños estarían en un ambiente conocido y de absoluta confianza, pero no siempre esta posibilidad existe.

Lo ideal es dejar a los más pequeños con personas con experiencia y preparada para cuidarlos.

Pero son muchas las veces que se necesita de la búsqueda de un jardín maternal o guardería. Esa búsqueda debe realizarse con tiempo y contando algunas veces con referencias del lugar y personal, para analizar cada propuesta con detenimiento.

Es bueno acercarse a los lugares encomendados, solicitar entrevistas con el personal y es indispensable recorrer las instalaciones, saber si ofrecen actividades natatorias, y asegurarse que se cumplan con los requisitos de higiene, seguridad, guardavidas -y la cantidad de ellos, que seguramente dependerá del número de niños que concurren-.

Es importante que los niños estén separados por edades, esto hará que sus actividades difieran según la misma (Shutterstock)© Proporcionado por Infobae Es importante que los niños estén separados por edades, esto hará que sus actividades difieran según la misma (Shutterstock)

Puede pasar que algunas veces esto sea obviado y prime la comodidad, que es la cercanía al hogar.

Los jardines maternales son el lugar donde los niños permanecerán varias horas del día, un combo que incluye cambios de rutina a las que deberán adaptarse, actividades nuevas, personas desconocidas, y ésto al inicio de la concurrencia al lugar puede modificar el temperamento de los niños: es ahí el momento preciso donde se necesitará de mucha paciencia, en el conocido período de adaptación.

Es importante que los niños estén separados por edades, esto hará que sus actividades difieran según la misma. La actividad cotidiana a la que se acontumbrarán, el fomento de las relaciones sociales y la intervención singularizada son ejes muy importantes a tener presente.

Las guarderías le proporcionan a los padres esta oportunidad de que los hijos se socialicen y se encuentren en un ambiente protector, cariñoso y divertido donde encontrar las actividades apropiadas puede resultar un desafío, pero el personal capacitado y con experiencia lo logra.

Para tener presente: las instalaciones

• El espacio no debe tener elementos peligrosos accesibles para los niños, ya que de esta manera se evitarían accidentes.

• La delimitación y el acceso deben preservar la seguridad, protegiéndolos de extraños y de elementos que puedan causar algún accidente.

• El suelo debe ser ligeramente blando, aislante y lavable, las paredes (pensando en caídas y golpes constantes) se recomienda que sean lisas. La puertas (evitar que sean de vidrio) y con las manijas a una altura aproximada 1.40 m para evitar cortes o lesiones en las extremidades.

• Las ventanas deben ser inaccesibles a la manipulación infantil.

• Evitar escaleras y desniveles.

• Los enchufes deben disponer de protección infantil, en ningún caso deben ser accesibles por los pequeños.

• Se necesitará de buena iluminación, óptima visión de los espacios

• Buen sistema de evacuación, ante posible incendio.

• Buena ventilación / climatización graduable.

• La comida debe cumplir una dieta mixta variada y completa, con incorporación de verduras, frutas

• Y es importantísima la hidratación.

• También en caso de bebés, la higiene, cada tres horas aproximadamente o revisar los pañales, evitando paspaduras.

Realizar actividades al aire libre, implica la exposición a insectos, caídas, exposición al sol, entretenimientos con diferentes juguetes y actividades acuáticas (Shutterstock)© Proporcionado por Infobae Realizar actividades al aire libre, implica la exposición a insectos, caídas, exposición al sol, entretenimientos con diferentes juguetes y actividades acuáticas (Shutterstock)

Además, las instalaciones deben contar con un sistema de botiquín básico, un número telefónico de emergencias y / o la presencia de un médico.

Recordemos también que al realizar actividades al aire libre, implica la exposición a insectos, caídas, exposición al sol, entretenimientos con diferentes juguetes y actividades acuáticas.

Las picaduras de insectos

La gran mayoría producen picor, un poco de dolor, e inflamación en la zona afectada, excepto que se manifiesta una reacción alérgica. En tal caso debe ser atendido de manera urgente.

Golpe de calor

Es una situación que los niños también pueden sufrir, por exceso de calor, por estar muy arropados o por falta de hidratación. Se debe sumergir inmediatamente al niño en agua fresca, debe tomar líquidos, y pedir asistencia.

Hemorragia nasal

El sol en exceso sin la debida protección sombreros o gorras, pueden producir vasodilatación, que llevará a un sangrado nasal, generalmente ceden a los 10 minutos, sólo comprimir la nariz con los dedos pulgar e índice tipo pinza. O aplicar con una torunda de algodón embebida en agua oxigenada en la fosa nasal sangrante. Y no perder la calma y usar protección.

Cuerpos extraños

Por curiosidad los pequeños suelen desarmar los juguetes y sus piezas,son llevadas a la nariz o a los oídos, no intentar sacárselos sino llamar a la emergencia y el especialista ORL se encargará de su extracción

Insolación

Las actividades al aire libre en horas no apropiadas, pueden insolar al pequeños, por lo que el personal, conoce los horarios apropiados para hacerlo y evitar este contratiempo.

Piscinas

Se recomienda siempre el uso de salvavidas, e ir introduciendo a los pequeños de a poco en aguas algo mas profundas y siempre bajo supervisión.

* Stella Maris Cuevas (MN 81701), médica otorrinolaringóloga, experta en olfato, alergista. Presidente de la Asociación de ORL de la Ciudad de Buenos Aires (AOCBA)