Cuatro síntomas que alertan sobre mayores posibilidades de padecer muerte súbita en jóvenes

El evento es muy poco común en esa franja etaria, pero es un acontecimiento trágico para las familias de quienes lo padecen dado su carácter inesperado.


Una noticia difícil de asimilar: una chica murió mientras festejaba su cumpleaños de 15. Se llamaba Julieta Anahí Ilundain, era representante de la Casa de la Cultura de Maschwitz, del partido de Escobar, y su fanatismo por la música folklórica la llevó a participar del festival de Raíces Provincianas.

La cumpleañera sufrió una descompensación cuando estaba recibiendo los arreglos florales junto a su hermano. En medio de ese escenario, algunos invitados le hicieron maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP), pero fueron en vano.

Una muerte natural, inesperada y rápida

Es un hecho inesperado, brusco que se debe a un parate de la circulación cardíaca. Puede suceder en personas sanas o enfermas. Eso es la muerte súbita. Algunos médicos indican que suele suceder a la hora de la aparición de los primeros síntomas, otros consideran un rango de 24 horas.

“En general se inicia con una arritmia, la fibrilación ventricular que hace que el corazón pierda su capacidad de contraerse de forma organizada y deja de latir efectivamente. Esto desencadena la pérdida de pulso, del conocimiento y la capacidad de respirar”, define Juan José Herrera Paz (M.N. 85.175), jefe del Servicio de Cardiología de Fleni. Para el médico es fundamental entender que si no se hace nada inmediatamente, la consecuencia es la muerte.

“La única alternativa que tiene el paciente es que reciba RCP que, en muchos casos, logra que la arritmia revierta y que la persona se recupere, es decir: una muerte súbita reanimada”.

Los cuatro síntomas que alertan sobre una posible muerte súbita

“Síntomas como palpitaciones (percepción de los latidos del corazón), taquicardia, cefalea, dolor en la región anterior del tórax pueden ser percibidos por los pacientes en diferentes situaciones, muchas veces de estrés.

En todos los casos, recomendamos que se realice la consulta médica, dado que el especialista -mediante examen físico y estudios complementarios- podrá hacer el diagnóstico correspondiente”, explica el cardiólogo Hernán Provera (M.N. 112.732).

El especialista sostiene que las causas de muerte súbita predominantes cambian según la edad. “Los menores de 35 años suelen sufrir cardiopatías congénitas y mayores problemas coronarios”, explica.

Muerte súbita en adolescentes

La mayoría de las muertes por paro cardíaco se da en adultos mayores, especialmente en aquellos con enfermedad de las arterias coronarias. El paro cardíaco es la principal causa de muerte en los deportistas jóvenes, pero la incidencia no es clara. Se estima que 1 de cada 50.000 muertes súbitas por ataque cardíaco al año ocurre en integrantes de ese grupo socioetario.

Las causas de la muerte súbita por ataque cardíaco en personas jóvenes varían. En la mayoría de los casos, la muerte se debe a una anomalía cardíaca. Un porcentaje alto de estas muertes es debido a enfermedades cardiológicas hereditarias lo que supone un riesgo para los familiares de sufrir el mismo desenlace. En los últimos años, se publicaron diversos protocolos dirigidos a sistematizar el estudio de estos casos y de sus familiares dirigido a evitar nuevos episodios que se pueden prevenir.

Saber que hay una causa hereditaria ayuda a la prevención del resto de la familia. Los tratamientos que tendrían que llevar a cabo los familiares afectados de este tipo de síndromes o enfermedades dependerían de la gravedad del mismo.

Los estudios básicos que se realizan en un chequeo son:

  • Electrocardiograma
  • Ecocardiograma
  • Ergometría

“Nosotros, dentro de los chequeos, hacemos el doppler cardíaco, que es la ecografía del corazón”, comenta Provera sobre los chequeos y agregó: “Ahí podemos ver cómo funcionan tanto las válvulas como la manera en que se bombea la sangre”.

En el caso de cualquier persona que tenga antecedentes familiares o factores de riesgo de afecciones que causan muerte cardíaca súbita, se recomienda realizar más exámenes de detección. Lo ideal es repetir la evaluación de los familiares a lo largo del tiempo, incluso si la primera evaluación cardíaca fue normal.

Fuente: TN/Con Bienestar