Gran pantalla chica

Un viaje a la paranoia según Francis Ford Coppola

Al mismo tiempo que se lo aplaudía por El Padrino y, sobre todo, por la superior El Padrino II, Francis Ford Coppola creó, en el contexto paranoico de la era Nixon, su filme más hitchcockiano, La conversación. Un espía, un técnico de sonido interpretado magistralmente por Gene Hackman, cree que una pareja de enamorados puede ser víctima de un asesinato. Escucha una y otra vez su conversación y comete el error de “meterse” en la historia ajena. Parábola también sobre el propio cine y la impotencia del espectador, permanece como uno de los más sólidos logros del cine de los setenta, el mejor de la historia. Sábado, 22, Fox Premium.

La reconstrucción

Aun que a Juan Taratuto se lo identifica más con la comedia, este drama ambientado en la Patagonia sobre un hombre que no tiene más alternativa que empezar de nuevo (gran trabajo de Diego Peretti) resulta de una profundidad y una precisión cinematográficas notables y poco frecuentes. La película además gana muchos puntos gracias al luminoso personaje de Claudia Fontán, que equilibra algún exceso de amargura por parte del protagonista. De lo más sensible que ha dado el cine argentino en los últimos años, con un uso de las locaciones en consonancia con la historia (algo poco frecuente). Viernes a las 22,Cine.Ar.

Con respecto a Susan Sontag

En momentos en los que es fácil tildar a alguien de “fascista”, en un tiempo en el que la corrección política encubre las más grandes intolerancias, es bueno volver a la figura de la gran Susan Sontag, crítica, ensayista, sobre todo una persona de una lucidez fenomenal capaz de transmitir conceptos complejos con sencillez. Este documental producido por HBO permite no solo conocer su historia y rescatar su figura, sino que funciona como un buen resumen de sus ideas y, al mismo tiempo, un estímulo para leerla. Buen filme para empezar. Jueves, 22. Max.

El Libro de la Selva 

Mucho más que la adaptación “con actores” del clásico animado de Disney, esta película de Jon Favreau rescata en gran medida el clima épico de los relatos originales de Rudyard Kipling. Conmovedora no solo por la historia del nene abandonado, criado por lobos y perseguido por un tigre, sino por cómo Favreau logra retratar el vínculo de un niño con la Naturaleza, algo que forma parte de la mejor tradición del cuento fantástico y de la metáfora universal. Los efectos especiales no son solo asombrosos, sino precisos. Va mañana a las 22 (ver en familia, de paso) por TNT.