Encuesta: Cómo se conectan los estudiantes más vulnerables del país para sostener las clases virtuales

El Observatorio Argentinos por la Educación realizó un relevamiento para indagar en la disponibilidad de dispositivos y el acceso a la conectividad en los barrios más vulnerables del país, para acceder a la modalidad virtual de educación. 


La plataforma interactiva de datos del Observatorio Argentinos por la Educación, contiene casi 90 millones de registros públicos sobre indicadores fundamentales del sistema educativo, como acceso y participación de los estudiantes, eficiencia del sistema (tasas de repitencia, tasa de promoción efectiva, etc.), recursos humanos, recursos físicos y financieros, y evaluación.

El presente informe se basa en un relevamiento realizado por vía telefónica, de carácter exploratorio, a 78 familias residentes en 71 barrios identificados en el Registro Nacional de Barrios Populares (RENABAP) y ubicados en diferentes regiones del país. Aunque la muestra no es representativa del universo de familias de barrios populares, los datos ofrecen una primera aproximación al impacto de la modalidad de educación a distancia en las trayectorias educativas de los estudiantes de nivel primario de sectores vulnerables.

En este caso el estudio se centró en un tema que ha generado mucha polémica a partir de la llegada de la segunda ola de contagios de Covid y las restricciones impuestas por el Gobierno Nacional, para la ciudad de Buenos Aires y el Amba, como es la interrupción de las clases presenciales.

Entre las conclusiones más importantes del estudio, se determinó que solo el 39% de los participantes del estudio  accede a un servicio de internet adecuado para las actividades escolares. Estos alumnos de barrios populares tienen menos acceso a conectividad y a dispositivos que sus pares de otros segmentos socioeconómicos y la herramienta más utilizada para las tareas es el celular.

Las dificultades de conectividad son uno de los principales obstáculos para la continuidad pedagógica a distancia en barrios populares.

El 31,2% de los encuestados manifestó que el servicio de internet es poco adecuado y con problemas constantes de conexión, el 18,2% dijo que es muy difícil conectarse, y el 11,6% expresó no utilizar ningún servicio de internet para hacer tareas educativas.

Los datos surgen del informe “Conectividad y dispositivos: actividades escolares de los alumnos de barrios populares durante la interrupción de clases presenciales”, realizado por el Observatorio de Argentinos por la Educación, con autoría de Guillermina Tiramonti (FLACSO), Víctor Volman y Federico Braga.

Es el segundo de la serie “La interrupción de clases presenciales en los barrios populares. Un estudio exploratorio sobre la situación de familias y estudiantes”.  El informe anterior indagó en la interrupción de actividades escolares y el riesgo de deserción, entre otras cuestiones.

Al comparar con los datos de la Encuesta Nacional Escolar 2020 del Observatorio de Argentinos por la Educación, realizada a una muestra representativa a nivel nacional de escuelas estatales y privadas, se observa que los estudiantes de barrios populares tienen menos acceso a conectividad que el resto de los estudiantes. Mientras el 18,2% de los chicos de los barrios populares participantes del relevamiento tienen mala conexión en sus hogares, la proporción es del 9,6% para los alumnos de escuelas estatales, y sólo un 4,9% para los estudiantes de escuelas privadas.

Con respecto a los modos y medios de conexión, se encontró que el 45,4% de los estudiantes de barrios populares participantes del estudio se conecta a internet por medio de datos, mientras que el 39% lo hace por medio de wifi o conexión de banda ancha. Por otro lado, el 15,6% de los chicos no utiliza conexión a internet para sus actividades escolares, ya que se trata de tareas o ejercicios fuera de línea.

Para un 83,3% de los alumnos de barrios populares que participaron del estudio, los abonos o datos disponibles son insuficientes para la conexión requerida por las actividades escolares. Solo un 16,7% de los estudiantes posee suficientes datos o abono para participar de manera adecuada en la educación a distancia.

Junto con la brecha de conectividad, los datos del relevamiento evidencian que el 79,2% de los estudiantes de barrios populares respondientes utiliza el celular para realizar actividades pedagógicas. Solo el 13% usa PC o notebook, mientras que un 6,5% no utiliza ningún dispositivo para realizar actividades educativas. Además, las familias consultadas mencionan el uso de la TV (28,9%) y, en menor medida, de la radio (4,8%) con fines educativos.

Al comparar con datos representativos de todos los estudiantes de primaria a nivel nacional surgidos de la Encuesta Nacional Escolar 2020, se observa que entre los alumnos de escuelas privadas predomina el uso de la PC o notebook para tareas escolares, con un 45,4%, mientras que entre los estudiantes de escuelas públicas el teléfono celular también es el dispositivo más utilizado (67,2%), aunque en menor medida que en el segmento de estudiantes de barrios populares.

Solo el 11,3% de los alumnos de barrios populares que participaron del estudio posee un dispositivo digital propio. Es decir que 9 de cada 10 estudiantes (88,7%) comparten los dispositivos tecnológicos con hermanos u otros miembros de la familia.