A lo Bukele, el gobierno de Pullaro intenta frenar los delitos dirigidos por presos de alto perfil desde la cárcel

Con fuerte imágenes, que fueron difundidas a través de cuentas del gobierno, el propio Gobernador, la Vicegobernadora y el Ministro de Seguridad, mostraron en redes sociales como se trabaja con los presos más peligrosos de la provincia. “Si no lo entienden, cada vez la van a pasar peor”, se lee en los comentarios que las acompañan.


En la imagen se observa a reclusos de cárceles santafesinas, que luego se supo pertenecen a un pabellón de alto perfil de la cárcel de Piñero, con el torso desnudo, esposados y sentados en el piso, custodiados por personal penitenciario y policial armado, tras una requisa. Una fotografía que remite a las que popularizó el presidente de El Salvador Nayib Bukele, hace un tiempo, para mostrar al mundo cómo combate el crimen organizado en su país.

La imagen, con marca de agua que muestra el logo de las gestión Pullarlo al frente de la provincia, aparece posteada en las cuentas del Ministro Pablo Coccoccioni, con el comentario : “No vamos a retroceder ante las amenazas. Si no lo entienden, cada vez la van a pasar peor”.

También en cuentas del Gobierno de Santa Fe, se pueden observar esas imágenes acompañadas del siguiente texto: “Tenemos un plan de Seguridad, sabemos cómo llevarlo adelante y estamos trabajando para eso. Desde las cárceles salen las órdenes para hacerle la vida imposible a los santafesinos”.

Luego asegura que “se terminó el tiempo de home office liberado, sin control y con empleados penitenciarios que eran apercibidos si molestaban a los presos”.

“No vamos a retroceder ante las amenazas. Tenemos el mandato del pueblo santafesino para restaurar la tranquilidad de los vecinos. Los presos están presos, no vamos a aceptar ninguna extorsión y si no lo entienden, cada vez la van a pasar peor”, cierra el mensaje.

Las imágenes de lo sucedido durante una requisa en el penal de Piñero, dentro del pabellón que habitan presos de alto perfil, fueron difundidas luego de una situación muy grave que se produjo el último sábado, cuando un colectivo en el que se trasladaba personal del servicio penitenciario fue atacado a balazos, resultado herido en su cabeza uno de los oficiales. Y después de varias balaceras con mensajes dirigidos a las autoridades provinciales y amenazas al gobernador Maximiliano Pullaro y su familia.