Jenifer Lauría, la última eliminada de Gran Hermano, se confesó con Ángel de Brito sobre su conflictiva relación con la familia de su ex pareja y padre de su hija, Ricardo Centurión. Durante su mano a mano, la botinera reveló la razón del porqué falló su relación con el futbolista y si volvería con él en un futuro.
“Me separé porque me cansé de que me meta los cuernos. Me hizo sufrir un montón, estaba súper enamorada de él, enamorada de verdad. No estaba con él por la fama, siempre mantuve el perfil bajo, nunca me interesó”, confesó en LAM.
Al ser consultada sobre las hermanas de su ex pareja, Jenifer se quebró en llanto y pidió no hablar sobre eso porque ellas y su familia siempre “la salieron a matar”.
“Inventan cosas. Estando en pareja con él, embarazada, decían que trabajaba de prostituta. Decían que mi hija no era hija de él. La pasé muy mal en el embarazo”, recordó. “Yo no le saqué nada, me dio esa casa donde yo estoy viviendo, que se lo recontra agradezco, y una camioneta. Nada más”, agregó.
Sobre si hubo violencia dentro de la relación con el futbolista y su familia, la participante de GH aclaró que “nunca le levantó la mano” pero que “sufrió mucha violencia psicológica”.
La relación entre Jenifer y Ricardo Centurión inició durante un difícil momento en la vida del futbolista, había sufrido la perdida de su novia Melody Pasini y la de su abuela en el 2020. Al año siguiente, la pareja dio la bienvenida a Emma, su hija, cuando aún seguían juntos, pero finalmente se separaron en el 2023.