¿Qué supone la supresión de patentes de las vacunas contra el Covid?

El gobierno de Estados Unidos anunció este miércoles que respalda la liberación temporal de las patentes de las vacunas de Covid-19 para que puedan ser producidas en otros países. Esto ha generado esperanzas en el combate a la pandemia pero también críticas del sector farmacéutico.


La representante del gobierno de Joe Biden en la Organización Mundial de Comercio (OMT), Katherine Tai, anunció el respaldo de su país en un comunicado.

“Esto es una crisis global de salud y las circunstancias extraordinarias de la pandemia requieren medidas extraordinarias”, dijo Tai.

“El gobierno cree firmemente en la protección de la propiedad intelectual pero para acabar con esta pandemia apoya la exención de estas protecciones para las vacunas para Covid-19”, agregó.

Estados Unidos y otros países habían bloqueado anteriormente las negociaciones en la OMC propuestas por India y Sudáfrica de ayudar a los países en vías de desarrollo a producir sus propias vacunas usando la propiedad intelectual de las farmacéuticas.

Recordemos que hay tres compañías de Estados Unidos (Moderna, Pfizer y Johnson&Johnson) que desarrollaron, producen y venden las vacunas.

¿Qué supone la propuesta de EEUU de suprimir las patentes de las vacunas del Covid?

La suspensión del Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio significaría en la práctica que las fórmulas de fabricación de los distintos fármacos contra el Covid-19 pueden copiarse libremente, sin necesidad de compensar por ello a las productoras originales

Las patentes normalmente tienen una vigencia de 20 años, aunque no es necesario que una empresa farmacéutica o de cualquier otro sector espere ese tiempo para poder negociar con otras firmas.

El apoyo de EEUU a una suspensión de las patentes sobre las vacunas contra el Covid, que ha generado esperanza en el combate a la pandemia pero también críticas del sector farmacéutico, significa el visto bueno a aquella propuesta presentada en octubre por la India y Sudáfrica ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Esto  supondría suspender temporalmente, quizá hasta el fin de la pandemia, los derechos de patente de estos productos, que se contemplan en el llamado Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (TRIPS por sus siglas en inglés).

Desde la presentación de la propuesta, ésta ha tenido el apoyo del bloque de países en desarrollo, que actualmente tienen menos posibilidades de acceso a las vacunas anticovid (sólo un 0.3 % de los 1.100 millones de dosis administradas en el planeta se han inoculado en países de bajos ingresos).

En la vereda de enfrente se han situado países en su mayoría desarrollados, muchos de ellos sedes de grandes farmacéuticas, como EEUU hasta ayer, las naciones de la UE (este miércoles más abiertas al debate), Suiza, Japón o Australia, entre otras.

Brasil era uno de los pocos países en desarrollo que se había alineado con este segundo bloque, aunque en los últimos meses ha relajado su postura a favor de una liberalización de la producción de vacunas, en coincidencia con el recrudecimiento de la crisis sanitaria en el país.

La liberación de la patentes abarcaría además la reducción de las trabas a la exportación de ingredientes para las vacunas, pues muchas de ellas necesitan cientos de ellos para la fabricación de dosis y han tenido en algunas ocasiones que suspender la producción por falta de alguno de ellos.