El Gobierno permitirá exportar las vacas conserva a China

Es una categoría de hacienda vacuna que no se consume en el mercado interno. También liberarían las ventas externas de carne kosher para Israel. Estiman que así el cepo a la carne se reduciría al 30%. 


Las vacas de conserva se podrán exportar a China, según una nueva flexibilización del cepo a la carne que prepara el Gobierno y anunciaría en las próximas horas. Esa categoría de hacienda vacuna no se consume en el mercado argentino, y fue uno de los ejes de las quejas del sector ganadero frente las restricciones implementadas desde el 20 de mayo.

El 23 de junio, por el decreto 408, el cepo exportador se redujo al 50% pero se restringieron hasta fines de año las exportaciones de 7 cortes, los más consumidos en la “mesa de los argentinos”: asado de tira, vacío, falda, matambre, tapa de asado, cuadrada y paleta. Con todo, a pesar de la flexibilización parcial, el descontento de los productores agropecuarios, y de la agroindustria en general,

En términos políticos, la nueva medida es un intento por descomprimir la protesta que hará el campo el próximo viernes, con eje en San Nicolás, en el norte bonaerense, pero también en otros lugares del país.

La cadena productiva de ganados y carnes ha reclamado que esa categoría vacuna no tiene demanda en el mercado interno y prácticamente se exporta en su totalidad a China, aunque también se importa desde otros países, como Rusia, que también quedaría habilitado como destino.

En el Gobierno habrían entendido la inquietud y destacaron que “el objetivo no es restringir las exportaciones sino controlar el precio de la carne en el mercado interno, que -consideran- en los últimos días se ha estabilizado”.

El anticipo de la medida ante la opinión pública, antes de hacerse efectiva, tendría que ver con el afán oficial de descomprimir las manifestaciones agropecuarias, junto a otros sectores de actividad como el turismo y la salud, que participarían de los actos junto al campo. Habrá que ver si esta flexibilización cumple en alguna medida el objetivo de distensión o es insuficiente y y llega tarde.

Si bien no hay todavía ninguna resolución oficial, trascendió de fuentes oficiales que la liberación de las exportaciones a la categoría vaca deberán implementarse dentro del cupo de 50% -respecto de lo que exportaron el año pasado- asignado a cada frigorífico exportador.

Con todo, los 7 cortes de carne cuyas exportaciones se cerraron hasta fines de año no se limitarían en el caso de las vacas de conserva, que se podrán exportar completas, pero debería ser dentro del cupo otorgado a 63 frigoríficos por un volumen de 29.773 toneladas hasta el 31 de agosto.

Vale tener en cuenta que desde el principio del cepo no se pusieron trabas a las exportaciones de las cuotas especiales con Europa (Hilton y 481), Estados Unidos y Colombia, a lo cual ahora se sumaría la liberación de los cortes kosher con destino a Israel, país que hizo un reclamo a través de su embajadora en la Argentina, Galit Ronen.

El contexto de la situación son las 900.000 toneladas que se exportaron en 2019 y 2020, entre las cuales China captó más del 70%. Incluso este año, entre enero y mayo, la potencia oriental importó el 78%, casi 200.000 toneladas. Por su parte, Israel adquirió en los primeros 5 meses del año 12.900 toneladas: un 5% del total.

Desde el Gobierno aseguran que si se suman las cantidades de carne que involucran los cupos ya exceptuados del cepo, más el 50% rehabilitado a fines de junio y las exportaciones de carne de vacas que se liberarían ahora, sólo quedaría una restricción del 30%.

En ese sentido, no queda claro cómo se llegaría al 70% liberado que calcula el Gobierno si se mantiene la restricción del 50% para cada uno de los frigoríficos. Por una cuestión matemática, la suma de las partes no alcanzaría para llegar a un porcentaje total superior.

El contexto de la situación son las exportaciones de carne vacuna que en 2019 y 2020.

 

Fuente: TN/Campo