Los talibanes tomaron Kabul y el presidente Ghani abandonó Afganistán

Tras diez días de ofensiva, el grupo extremista llegó a la capital y se prepara para tomar el poder a 20 años de la incursión militar de Estados Unidos. 


El presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, abandonó este domingo el país luego del ingreso de los talibanes a la capital, Kabul.

Este parece ser el último paso para que el grupo fundamentalista retome el control del país asiático tras la retirada de las tropas internacionales de suelo afgano.

 

El que fuera su gran rival político y ahora negociador jefe del Gobierno afgano con los talibanes, Abdulá Abdulá, confirmó la salida del mandatario, a quien mencionó ya como “ex Presidente”.

La situación en Afganistán es de extrema tensión, a tal punto que Estados Unidos evacuó su Embajada en Kabul y pidió a los ciudadanos que no pudieron salir del país que busquen refugio.

Abstención de violencia

Tras tomar el control de casi la totalidad del país, los talibanes ordenaron a sus combatientes que se abstengan de protagonizar incidentes violentos y permitan el paso seguro a cualquiera que quiera irse mientras negocian una transición de poder.

Ghani se vio sometido a una presión cada vez mayor para que presentara su dimisión después que las principales ciudades de Afganistán cayeran en manos de los talibanes en menos de 10 días.

Un portavoz de los talibanes le dijo a Yalda Hakim de la BBC que en la captura de Kabul “no habrá venganza” contra el pueblo afgano.

“Le aseguramos a la gente en Afganistán, particularmente en la ciudad de Kabul, que sus propiedades y sus vidas están a salvo, no habrá venganza contra nadie”, dijo Suhail Shaheen a la BBC.

“Somos los servidores del pueblo y de este país. Nuestros líderes dieron instrucciones a nuestras fuerzas para que permanezcan a las puertas de Kabul, sin entrar en la ciudad. Estamos esperando una transferencia pacífica del poder“, añadió.

Los talibanes fueron derrocados del poder en 2001, tras una incursión militar liderada por Estados Unidos, pero poco a poco el grupo islamista se pudo rearmar a lo largo y ancho de Afganistán.

La ONU pidió a los países vecinos de Afganistán que mantengan sus fronteras abiertas a medida que aumenta el número de civiles que se desplazan en el territorio.

Los talibanes controlan ahora todas las carreteras que llevan a Pakistán, el país vecino que ya alberga a más de tres millones de refugiados afganos.

Fuente: NA